Paranoia (Harry Styles)

10- Labios tibios

Kings of leon- closer

Ya había pasado una semana y las cosas estaban empezando bien para Harry, tenia empleo, Bridget le adelantó el sueldo de la primera quincena y se compró algo de ropa, comida y pintura para empezar a arreglar la casa.

La mañana de ese sábado empezó muy temprano para Émily que iba a acompañar a su tía al aeropuerto, Mackenzie viajaba a Canadá ese fin de semana para la boda de su mejor amiga.

Insisto, estas a tiempo, toma un vestido y algo de ropa y me acompañas vale- Émily negaba con la cabeza mientras se colocaba una chaqueta para salir, ese día el frío era inhumano.

De verdad no quiero ir, ve y diviertete yo debo terminar cosas para el instituto-

Las reuniones como las bodas no era lo de Émily, ha acompañado a su tía a una larga lista de este tipo de eventos y siempre termina molesta por querer venirse antes de tiempo. Asi que prefirió no ir y salir con Hendrix y Maiah.

Estoy aquí el lunes al mediodía, no quiero novios con ganas desenfrenadas en mi casa Eme- su tía bajo hasta la cocina y Émily salio con una pequeña maleta en la mano hacia el carro.

Su rostro palideció y tenia la boca seca, alguien había puesto con aerosol rojo la palabra asesino en la pared principal de la casa de Harry. No creía que alguien fuese capaz de algo así, sintio algo de pena y por si fuera poco él salía de su casa sin saber lo que había pasado.

Émily trató de no verlo directamente a los ojos, pero fue imposible, el llevaba un abrigo negro, unos jeans y la fuerte brisa revolvía todo su cabello, sin embargo este se dio cuenta de porqué ella lo observaba de esa manera y cuando se dio vuelta una sensación de ira le invadía todo su cuerpo sacando el frío que sentía hasta hace unos segundos.

Su rostro se había transformado, había puesto presión en sus labios y sentía una presión en su cabeza que lo hizo tomar una pequeña maceta y aventarla hacia la pared soltando un  sentido grito lleno de rabia y molestia, se quedó parado sin moverse y sus fosas nasales se abrían cada que respiraba furioso.

Mackenzie y Émily con la boca semiabierta observaban todo hasta que Mac tomaba por el brazo a emlily y subían al coche.

Es realmente repugnante eso, como pueden hacer ese tipo de cosas?- Mackenzie parecía indignada y Émily la veía sin decir nada.

Mató a dos personas tía-

Justificas eso Émily Cooper?- su tía se estaba alterando.

No, no lo justifico pero es un asesino no?-

Mira yo no se quien te contó la historia, pero tengo entendido que el no mató a su mamá, mató a su padrastro porque él había matado a su madre Émily- ella no supo que decir y pasó saliva mientras miraba a su tía.

Creí que...-

No importa Émily, te lo digo porque la versión que tu tienes es muy distinta a la mía, has estado paranoica con ese tema, y yo de verdad creo en como me contaron lo sucedido.

Lo se y creo que yo hubiese hecho lo mismo de no haber sido una niña miedosa- su voz se quebró y prefirieron no hablar mas del tema.

De regreso del aeropuerto Émily hizo parada en un café compró un frapuccino de caramelo y siguió su camino.

Ya la pared estaba pintada, el estaba sentado en uno de los escalones de la entrada con el bote de pintura a un lado y un cigarrillo en la mano. Cuando bajó del auto sin querer evitarlo miró en su dirección y el solo se levantó lanzo la colilla al húmedo césped y entró.

Paso por ti a las 7 te parece? Dile a Maiah para que estén listas- el mensaje de Hendrix la hizo despertarse y ver la hora- Demonios!- no sabia cuanto había dormido pero ya eran las 6:15 y llamó a Maiah y corriendo fue a bañarse y a arreglarse.

A las 7 en punto Hendrix estaba esperando afuera y ambas salieron riendo por alguna broma sin sentido de Maiah.

Son las 10 creo que ya debes ir a comer algo- Charlotte estaba parada al lado de Harry viéndolo servir los tragos en la barra.

No tengo hambre la verdad-

Pero igual saca tu trasero de aquí y ve a fumarte aunque sea algo, vamos acompañame- Harry le sonrió y asintió caminando hacia ella.

Vamos- y ambos salieron rumbo a la parte del estacionamiento.

Y bien, por qué llegaste con ese mal humor hoy?- charlotte daba una calada a su cigarro y metía su otra mano en el bolsillo de su chaqueta.

Hay cosas que te van a marcar para toda la vida y no hablo de huellas emocionales, hablo de marcas que te hace la gente luego de tu haber cometido un error-

Se a lo que te refieres, a mi me han señalado toda mi vida por haber intentado suicidarme cuando tenia 15 años, todavía soy la loca suicida para mi familia y la gente que me rodea- Harry aspiraba lo último de su cigarro y miró hacia arriba dejando escapar poco a poco el humo.

Un día vas a tener que contarme porqué lo hiciste.- Charlotte le regalaba una sonrisa.

Y tu, tu historia, eres realmente famoso, las personas saben disimular la mayoría de las veces pero es obvio que saben quien eres- Harry no dijo nada y se plantó frente a ella.

Lo siento, no es mi intención hacerte sentir mal- y tomó su mano.

No lo haces- la voz de Harry, grave y en ese momento casi silenciosa, le parecía jodidamente provocadora para la chica tatuada, que sin ningún problema lo tomó por la nuca y lo atrajo hacia ella. El abrió los ojos pero ella ya tenia sus labios en los de el, eran tibios, su aliento era a chicle de canela y su labial sabia a fresa, era una experta, su lengua entró sin problema alguno y le agarró las manos a el y se las colocó en la cintura, acto que hizo que el la atrajera más cerca de su cuerpo y ella separó sus labios sin despegar su frente de la de él. - A cuantas pacientes en Kleighton besaste?- el no pudo evitar soltar una pequeña risa y negó con la cabeza saboreandose los labios que aun sabían a fresa. Ella abrió mucho los ojos y le brillaban de deseo, mirando los suaves labios del chico que estaba frente a ella.

Pues para ser este tu primer beso, debo darte un 10- Ambos rieron y volvieron a besarse.

Cuando entraron no pudieron disimular miradas y a ratos ella pasaba por su lado y no perdía la oportunidad de decirle cosas y el trataba de no reírse mientras servía unas cervezas. De pronto en un pequeño descanso de personas pidiendo tragos. -Podríamos salir- el se paró a su lado y le hablaba muy cerca. Ella levantó la mirada y se reprimió las ganas de volverlo a besar cuando volvían a pedirle tragos en la barra.

Émily estaba parada junto a Hendrix en la barra y la mirada de Harry se topó con la de ella que luego miró a la chica que estaba aún sonriendo pícara para apoyar su cuello en su mano y mirar solo a Hendrix.