Capítulo 5: Trabajo nocturno

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La noche del miércoles se hizo presente en la oficina central de policías. El antepenúltimo en salir del lugar era Choi Jiseok. Un aprendiz de intercambio. Estando a oscuras, ambos alfas se quedaron hasta muy tarde haciendo sus deberes. Al terminar aquello, siguieron viendo los casos de los bares para ver si hallaban algo adicional.

—Recapitulemos una vez más, por favor.

—A ver, tenemos... —dijo, abriendo el expediente.

Jimin se preparó para anotar, ver y verificar lo que tenía en mano. El alfa hojeo las primeras hojas de los expedientes, paró de hacerlo y desvió su vista del documento hacia su compañero.

—¿Otra vez mirándome, Kim?

—Sí, Park. —afirmó, poniéndose una mano en su mejilla y seguir viéndolo con una sonrisa.

—Ah, te estás comportando como un coqueto —bufó, alzando una ceja. —. Por favor terminemos esto, lindo.

El alfa se cubrió la boca evitando reírse, miró el expediente y empezó a leerlo. En cambio, su compañero movía con impaciencia su bolígrafo en la pequeña libreta.

—Esto es lo que tengo, Jiminie —comenzó a decir. Él lo miró curioso. —. El sospechoso Jung frecuentaba los bares Luke y Day Night con una furgoneta negra, en ella llevaba mercadería ilegal a un cliente y ese día fue arrestado gracias a su pareja, Choi Ji-an —tragó saliva y continuó. —. Ahora, tenemos a nuestro sospechoso principal que frecuentaba mucho en el bar "Try Beauty" y actualmente solo retira bebidas.

—Listo.

—El único dato que nos falta es si sigue teniendo su negocio en el Norte.

—Gracias, Tae. Siguiendo el panorama dado, en vista que el jefe superior del Oeste me haya dicho lo mismo, puede que en uno o tres años haya pasado algo a su negocio.

—Estoy de acuerdo. Debo agregar que en estos días se me vino a la mente que podría estar en el Sur también —expresó, cerrando su agenda. —. Pero antes, primero debemos de buscar más pistas de su cómplice.

—Manos a la obra, compañero.

Varias horas en intercambiar palabras, documentos y anotaciones, llegó un punto en donde uno de ellos se había quedado dormido encima de su escritorio. Pasados diez minutos después, poco a poco sentía la pesadez de sus ojos cerrarse por tener mucho sueño, por lo que Taehyung se levantó de su asiento para darse un respiro. Se estiró, caminó a su costado y volvió hacia su puesto. Guardó su celular en su bolsillo, miró la hora en el ordenador y amplió los ojos. Eran las tres de la mañana.

—Joder.

Estaba conmovido, dado que se habían quedado toda la noche en la oficina. Pasó su mano por su cabello largo, observó el puesto de su colega y fue hacia él. Cuando llegó, quiso evitar desplomarse de la ternura que desprendía el rubio.

—Por la Diosa Luna, te has quedado dormido, amor. —dijo en voz baja, sonrió y besó su frente.

Le parecía demasiado adorable como dormía. Preocupado por su bienestar, tomó su chaqueta, lo tapó y salió de la oficina. Sacó su celular de su bolsillo, lo desbloqueó y empezó a leer las notificaciones que le habían llegado. Notando que no eran muchas, solo vio que había recibido varias llamadas perdidas del agente Yeonjun.

Guardó de nuevo su móvil en su bolsillo, se sirvió un vaso con agua y entró de nuevo. A pasos lentos, se dirigió a su puesto. Al pasar a lado de su compañero, escuchó leves ronroneos. Le acarició algunos mechones de su cabello corto, acomodó sus cosas a un lado, colocó su vaso en su sitio y lo alzó a sus brazos.

A escondidas • 𝐕𝐌𝐈𝐍 🖋 || EN EDICIÓN ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora