Un descanso tranquilo

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-Ya... Ya, tranquilos - Kushigo sonreía mientras abrazaba a ambos - Ya desperté, haha.

Los tres pasaron varios segundos abrazados, hasta que Cushiro se separó. Mientras, Tara  y Shivena retiraron una jeringa de la pata de Kushigo, que iba conectada a la sonda.

-¿Q-Qué te pasó? - preguntó Cushiro

Kushigo volteó su cabeza hacia la yama.

-Puedes decirles - dijo esta.

Cushiro y Clembri voltearon de la sorpresa hacia Eiki.

-¿Eh? ¿Ella quién es? - preguntó el primero.

-Ella es... Shikieiki Yamaxanadu, es una yama, y la responsable de devolverme mi alma - respondió Kushigo sonriendo ligeramente.

-¿T-Tu alma? -Cushiro preguntó y, como si acabase de recordar algo, se giró abruptamente al cuerpo inerte en la habitación 

-Ataque al alma... - Clembri también prestó atención al cuerpo de Yuyuko en la habitación.

Ambos parparianos se giraron de vuelta a Kushigo.

-¿T-T-Te mató? - preguntó Cushiro impresionado

Ligero silencio.

-Sí... Yuyuko me mató... 

Varias pulgas salieron violentamente por la habitación, dirigiéndose hacia el cuerpo de Yuyuko. Las presentes se pusieron alerta, a excepción de Eiki, quien mantenía una postura calmada.

- P-Pero la perdoné, n-no hagan nada, por favor - Kushigo alcanzó a decir rápidamente.

-¡¿Tú qué?! - preguntó Clembri completamente extrañada - ¿P-Perdonaste a tu asesina?

-S-Sí lo hice - Kushigo dio un gran suspiro - No causen un desastre, se los pido.

Clembri agachó la cabeza lentamente. Las pulgas poco a poco regresaban tanto a Clembri como a Cushiro.

-¿T...Te mataron? - preguntó él con la cabeza inclinada.

-Eh, parcialmente - Kushigo estaba dudoso sobre como responder.

No importó al final, Cushiro se abalanzó sobre su hermano, llorando, seguido de Clembri, quien sintió una fuerte tristeza que socavó a su ira repentina.

Eirin le hizo un gesto a la yama para salir por un momento de la habitación. Esta la siguió.

-¿Parcialmente? - preguntó Eirin.

-El ataque de Yuyuko mató su alma, pero su cuerpo lo resistió - respondió la yama.

-¿Entonces Kushigo no podría haber reaccionado? 

-No debería hasta que recuperase su alma - Eiki se extrañó - ¿O lo hizo antes?

-No, r-recién acaba de reaccionar, hasta donde sé.

La yama asintió.

-Me alegra haber cumplido con mi trabajo - mencionó y se giró hacia Yuyuko - Ella debería despertar pronto.

-¿No deberías llevarla a su hogar? - Eirin se extrañó

-Quiero que haga las paces con Kushigo. 

-¿Por qué no la despiertas de una vez?

-¿Quieres que Eientei sea un caos?

Ligero silencio

-Buen punto - Eirin dio un suspiro y se giró hacia la habitación - ¿Te quedarás?

-Que se calmen los tres y me retiro. Aun tengo trabajo que hacer.

Ambas entraron a la habitación

Gensokyo, un nuevo mundo [No oficial]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora