10. 𝖯𝗂𝗍𝗒 𝗉𝖺𝗋𝗍𝗒

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Estaba muy segura de que mis predicciones se harían reales, cada una de ellas pasaría en menos de una semana, y no estaba muy segura del como resolvería tantos problemas.

¿Niragi se aprovechara de mi a ausencia de Takeru? Pero claro que sí.

¿Aguni me ayudaria? Claro que no.

¿La playa va a arder? Si.

¿Chishiya me va a ganar? Claro que no.

Podía aceptar todo, menos que al final de todo me ganarán. Pueden hacer lo que quieran conmigo, mientras la que ría al final sea yo.

Voy a tener que soportar para ver sus rostros de disgusto.

Pero... ¿De qué hablo?

¿Porque pienso estás cosas mientras estoy a lado de Takeru?¿No debería estar lamentando mi perdida?

"Se fuerte y no desistas."

No, es justamente lo que Takeru querría que yo pensará, no debería lamentarme por él.

—Bien, ya que no tenemos jefe. Aguni es el postulante perfecto para ello.—escuche vagamente a Niragi mientras sostenía la mano de Takeru entre mis manos con un gesto serio sin sentimiento alguno.

—Josh...—Arisu intento acercarse a mi, pero fue rápidamente detenido por Niragi el cual lo empujó y luego le apuntó con su arma.

—Lejos de la huérfana.—acaricié la mano de Takeru con detenimiento y luego la alze para darle un beso en la mano como una señal de afecto.

—Eras como un padre para mí.—le dije mientras lo observaba, innerte.—Algo que nunca tuve.

—Vamos a hacer votaciones.

—Se supone que el segundo al mando debería pasar a...—antes de que Kusuryu acabará de hablar, Niragi le señaló con su arma, una sonrisa cínica se formó en el rostro de ese patán ante la situación.

Tenía demasiado poder.

—¿No debería ser el más fuerte?—indagó Niragi.—Nosotros mantenemos a la playa fuerte y siempre insisten en mantenernos al margen. ¡Ese trato injusto termina hoy!

—Cuando el número uno muere, se sube el número correspondiente. Eso es lo que todos acordamos.—dijo Kusuryu viendo el arma que le apuntaba.

Niragi bajo su arma, yo voltee hacia Takeru y con rapidez tome el número en su muñeca.

—¡Seamos democráticos y votemos!

—¿Votar porque? Tomarán todo a la fuerza.—dije alzando la mirada hacia Niragi.

Niragi me observó fijamente, luego dejo salir una risa sarcástica.

—¿Y si te callas y sigues llorando?

Lentamente me incorporé y mantuve fija mi vista en Niragi.

—¿Y si te callas y dejas de amenazar a la gente?—Niragi me apunto con su arma.—Dios, que miedo.—hablé con ironía.

—Llevensela, me encargaré de ella después.—Niragi y yo volteamos hacia Aguni, quien había dicho aquello.

Aguni y yo nos quedamos viendo misntras dos de sus soldados de acercaban a mí por detrás, al tener la vista fija el pareció tragar saliva y luego desvío la vista.

Tiene culpa, él lo mató.

—Tu lo mataste.—dos chicos me tomaron de los brazos y los llevaron detrás de mi espalda.—Tu fuiste.

—Estas loca.

—Lo estoy.—admití mientras me comenzaban a escoltar fuera de la sala.

Mientras me sacaban a la fuerza, pude ver a varias personas y sus rostros.

Hᴇsɪᴛᴀᴛᴇ  ᶜʰⁱˢʰⁱʸᵃ ˢʰᵘⁿᵗᵃʳᵒ̄ [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora