Hᴇsɪᴛᴀᴛᴇ ᶜʰⁱˢʰⁱʸᵃ ˢʰᵘⁿᵗᵃʳᵒ̄ [CANCELADA]

11. 𝖬𝖾𝗋𝖼𝗒

¿Qué era está sensación?

Mi cuerpo se sentía corrompido, mis piernas temblaban y mis ojos estaban secos de haber llorado tanto. Me sentía sucia por todos lados, y me dolía de alguna manera el estar sola en aquella cama donde habían abusado de mi de una manera tan cruel.

La droga apenas estaba cesando sus efectos, y sabía que para cuando desaparecieran por completo, el dolor y asco serían aún mayores.

Estaba abrazada a mis piernas, con la mejilla recargada en mi pierna, me dolía por el golpe que seguramente Niragi me había metido.

Con miedo, suspiré y me levanté lentamente de la cama, cuando me puse de pie me caí inmediatamente por el temblor en mis piernas, en ese momento solté un solozo por el dolor de aquella caída, fruncí los labios y trague con fuerza.

—Vamos, arriba.—alze mi mirada e hice una mueca al ver a Takeru frente a mi, seguramente era la droga.—Vamos, toma mi mano, arriba.

—No te puedo tocar.—dije por lo bajo.

—Entonces levántate sola.—Takeru se hincó ante mi, y luego pasos su mano por mi cabello.—Se que duele, y mucho. Pero Joshiro, haz que le duela el doble a él.

Alze mi mirada nuevamente, Takeru me sonrió y me pasó la mano por la mejilla.

—Eres mi princesa, pero siempre fuiste una guerrera.—Takeru dejo mi mejilla y luego se levantó.—Levantate, pelea y haz que sufra diez veces más de lo que te hizo sufrir a ti.

Me le quede viendo a Takeru, luego con amargura, me apoye sobre mis brazos y me levanté poniendo muchas fuerzas en mis piernas.

Para cuando me levanté, él ya no estaba ahí.

A paso lento, caminé hacia el baño, encendí la luz y luego me ví al espejo. De momento, me asusté al verme, pero luego tomé compostura. Tomé con rabia una toalla y la moje con agua; luego la pasé por mi cara para quitar los rastros de sangre.

Tenía cortadas en el rostro, y no sabía de donde habían venido; moretones en todo el cuerpo y mucho dolor... En todas partes.

La parte más difícil de todo esto, fue tener que lavarme... En medio de las piernas, eso me tomó tiempo, tuve que respirar muy profundamente primero, para luego hacer aquello, y posterior a ello observar sangre.

Esto era tan cruel que no podía creer que era yo la que estaba haciendo esto, tal vez mi conciencia estaba en otro cuerpo...

—Me las... Me las vas a pagar.—susurre para luego dejar caer la toalla.

—¿Joshi...?—lentamente voltee, y mi vista se posó sobre Arisu, quien estaba detrás mío.

—Alice...—Arisu se veía aterrado, puso una mano sobre su boca.

—Por dios.

Arisu retrocedió unos pasos, luego volteó hacía sus lados, y con rapidez fue hacia la puerta; al cabo de unos segundos volvió con una chaqueta.

—¿Puedo?—preguntó antes de dar un paso hacia mi, yo asenti.

Arisu me pasó la chaqueta con lentitud, yo la tomé y me la puse con calma.

—Arisu, porfavor ayudame a llegar a mi cuarto.—Arisu asintió repetidas veces sin dudarlo.

—¿Cómo...?—extendi mi brazo hacia él, indicándole que me ayudara a caminar, él camino con lentitud hacia mi y dejo que pasará mi brazo por su hombro, luego el con mucho cuidado puso su mano en mi cintura.—Tendré cuidado.

—Gracias.

Arisu comenzó a caminar con lentitud, cuando salimos del cuarto, pude apreciar a Usagi quién estaba de espaldas a la puerta intentando vigilar.