Hᴇsɪᴛᴀᴛᴇ ᶜʰⁱˢʰⁱʸᵃ ˢʰᵘⁿᵗᵃʳᵒ̄ [CANCELADA]

07. 𝖠𝗋𝗂𝗌𝗎

La confianza es algo maleable y frágil en su totalidad. Debes formar un lazo muy específico para poder tener certeza de que este ámbito es viable e irónicamente confiable.

¿Qué debes ver en una persona para saber si es confiable?

Bueno.

No lo sé, pero creo que es algo que se siente y con el paso del tiempo puedes confirmar al conocer más a la persona con la que deseas manejar este tema.

Yo no tenía mucho tiempo para formar ese lazo, cada vez la tensión entre Aguni y Takeru se sentía aún más y tal vez en un momento de ellos no podríamos evitar darle una mala conclusión a todo.

Necesitaba a alguien ya mismo.

Y milagrosamente la persona que necesitaba llegó como caída del cielo. Aunque realmente había sido capturada por Takeru con una amiga al estar cerca de nuestro territorio.

Arisu y Usagi; dos chicos de apariencia cansada y definitivamente una simple mirada hacia ellos te podía verificar que eran dos personas que ya habían pasado por bastantes cosas, ya fuera juntos o individualmente.

Mientras la plática de Takeru con ellos avanzaba, podía notar más cosas en Arisu, al analizar sus movimientos podía darme cuenta de que era una persona muy expresiva que no podía ocultar sus reacciones honestas ante cualquier cosa que le decían o hacían.

—Disfruten de su estadía en la playa.—concluyó Takeru a su introducción tétrica y amenazante para ellos.—Sueltenlos, y que Joshiro les muestre sus lugares.

Takeru me dirigió la mirada y movió levemente la cabeza indicándome una orden, yo asentí indicando que iba a acatar su orden.

—Quinientos veintinueve para ambos.—me dijo Kusuryu mientras me daba un número de habitación.

—Vale.—dije, para luego voltear hacia Arisu y Usagi quienes estaban siendo soltados.—Vengan por acá.

Ambos se tardaron unos segundos en querer seguirme, pero se vieron obligados a hacerlo.

Ambos se mantenían callados mientras caminaban detrás mío, yo les daba un reojo de vez en cuando.

—Aqui dormirán ambos.—les indique mientras les abría la puerta.—No hay seguros en las puertas así que les recomiendo poner una silla por las noches.

Arisu y Usagi me vieron con curiosidad.

—Todos necesitan privacidad.—les dije, luego lanze un suspiró.—Si no me equivoco es probable que haya un traje de baño para ambos allá adentro, si no se sienten cómodo con el díganme y les ayudaré a cambiarlo.

Arisu me vió de pies a cabeza.

—Disculpa pero ¿Porqué no usas traje de baño?—mire mi ropa, luego alze la vista hacia Arisu.

—Yo no lo necesito.—dije.

Arisu frunció el labio con duda.

—Me gustaría hablar contigo.—hable dirigiéndome a Arisu.—Claro, solo si quieres saber.

Lanze al aire el número de su habitación, Usagi lo cacho cuando estuvo a su alcance.

—Te veo en la habitación del té.

—¿Habitación del té?

—Preguntale a quien sea donde queda.

La habitación del té era una habitación que Takeru había reservado únicamente para el consumo de té, un lugar donde el y yo solíamos ir a hablar tranquilamente sin ninguna sustancia ilícita de por medio.