𝗟𝗼𝘂𝗱 キ 𝘴𝘦𝘰𝘬𝘴𝘰𝘰

LXXIV

Joshua sollozó, quizo arrojar el cuaderno lejos, pero se contuvo, lo dejó sobre la camilla, cerca de las piernas de Seokmin, se inclinó hacia él para tomar la mano del castaño, apretándola entre las suyas, siguió llorando, escondió el rostro en las sábanas de la camilla.

—¿P-Por q-qué ha-ces esto? —balbuceó, entre desgarradores sollozos.

Pensó que su novio estaba siendo bastante cruel, pesimista, y todo lo que él no quería pensar Seokmin se lo decía con tanta simpleza que dolía.

—S-Shua... —murmuró Seokmin, se sintió mal al ver lo que había logrado.

Sus palabras no tenían la intención de hacer llorar, lo las había escrito para que su novio no sufriera.

Para él eran bonitas, eran sus mejores pensamientos.

Contuvo las lágrimas.

—No, Seokmin —Joshua alzó el rostro hacia él, totalmente empapado en lágrimas—. Y-Yo te necesito, te amo y te quiero a mí lado... Quiero una vida contigo, estoy más que seguro que eres la persona indicada... No me dejes, porque en serio... En serio t-te necesito —sollozó de nuevo.

Seokmin se mordió el labio con fuerza, un nudo en su garganta no le dejan responder.

Continuó con la segunda parte de lo que quería decirle.

Extendió el sobre que había mantenido en su otra mano hacia el pelirrojo, quién dudó un momento antes de tomarlo.

Se topó primero con una carta.

"Joshua:

Gracias.

Con todo mi corazón.

Gracias"

—No de nuevo, Seokmin, n-no... No quiero leerla —se negó, no lo soportaba—. No quiero seguir–

Seokmin tomó su mano, deteniendo sus movimientos y sus palabras.

—Por mí —murmuró.

Joshua tragó sus lágrimas un segundo, antes de asentir, volviendo al papel.

"¿Sabes que eres lo mejor que conocí en mí vida?

No puedo expresar todo lo que hiciste por mi, porque no hay palabras para tanto.

Incluso decir "Gracias" se queda corto con todo lo que mereces, todo lo que te debo.

Pero no conozco otra palabra para decir.

Gracias.

P.D.: mira de nuevo el sobre."

Joshua quería romper algo, sólo para desahogarse.

Miró el sobre de nuevo, obedeciendo, para encontrar una serie de fotos Polaroid, sacadas con la cámara que él le había regalado.

Notó sus manos temblar al tomarlas.

Miró la primera foto.

Era Seokmin, sonriendo levemente, con su lindo eye smile, y sus brillantes ojitos de cachorro que siempre lo enamoraban.

Sus manos, a la altura de su pecho, hacían una seña.

"Yo".

Pasó a la siguiente foto, igual a la anterior, con otra seña, una que conocía y le tenía gran significado.

Le seguían un par de fotos, que tardó unos cuantos segundos en comprender que eran una secuencia.

Seokmin alzaba su mano en un puño, sobre su hombro, con el dedo índice extendido y giraba su brazo con ese gesto, en un círculo.

"Por siempre".

Una sonrisa estúpida se instaló en su rostro, más lágrimas surgieron.

—Yo te amo por siempre —dijo, y notó a Seokmin asentir.

—Bien —dijo el castaño—. Te a-maré por si-empre.

Joshua limpió sus lágrimas con torpeza.

—Te amaré por siempre —susurró.