Mí Mujer (Vos y Enzo Fernández 💕)

Visita

/Enzo/
Apenas entré la mirada de Male fue dirijida hacia mí, no esperaba que me viera tan rápido pero bueno.
Tenía mis manos en mis bolsillos y estaba levemente apoyado sobre la puerta de la cafetería.
La vi abrir los ojos muy grandes y quedarse paralizada, poco a poco sus labios formaron una sonrisa y la vi salir corriendo en mí dirección, di un par de pasos alejandome de la puerta y ella saltó subiéndose encima mío. Sus brazos rodearon mis hombros y sus piernas mí cintura mientras escondía su cara en mí cuello.
Sabía que todos nos miraban pero la agarré del culo sin descaro.
Ella separó su cara de mí cuello para mirarme unos segundos con una gran sonrisa, sabía que yo también estaba sonriendo así.
-SOS REAL- me gritó en la cara.
Voy a aceptar que extrañaba también sus gritos de la nada.
-Soy real morocha- y la besé.
Ahí enfrente de todos, aunque la cafetería se veía bastante vacía.
Ella me correspondió poniendo sus manos atrás de mí cabeza para apretarme contra ella.
Cuando nos separamos la dejé en el piso y ella me abrazó por la cintura.
-¿Que haces acá?
Su sonrisa no se borraba mientras yo jugaba con su pelo atado en una colita.
-Vine a ver a mí novia.
-¿Por eso no me respondías?
-Estaba viajando perdón- hice un pucherito.
-¿Que hacías en Brasil?
-Escala del vuelo.
Sonrió más y me dio un pico.
-Te amo tanto.
-MALENA LA MESA 8 TE ESPERA- gritó un hombre.
-Mierda, mí jefe- miró hacia donde la llamaron -sentate en la mesa 7 así te atiendo yo gordo.
-Dale- le di un último beso y ella corrió a la mesa 8 para atender a las personas que había ahí.

/Male/
Soy oficialmente la mujer más feliz de Buenos Aires.
Enzo está acá y yo no lo puedo creer.
Ya quiero que sean las 21 para irme de acá con el.
-Buenas ¿Que va a pedir?- me acerqué a la mesa 7 después de despedir a los de la 8 y recibir mí propina.
-Me gustaría comerme a la mesera- me miró y cuando se rió supe que me había puesto roja.
-Ese plato lo damos en mí casa, acá no- me reí y el sonrió como un nene.
-Espero con ansias ir a ese restaurante después.
-Te llevo con entrada VIP a vos lindo.
-Entonces por ahora solo quiero unas media lunas y un café cortado bombona.
-¿Bombona?- me reí del apodo nuevo.
-¿Alto cringe no?- también se rió.
-Si lo decís vos no me da cringe- le sonreí -ahi traigo su pedido señor.
Me reí y me fui, se que me está fichando el culo, aprendí un par de cositas de el estando en Qatar.
Enzo es claramente team tetas pero nadie se niega a un culo siendo realistas.
Volví al mostrador con cara de feliz cumpleaños.
-No puedo creer que vino desde Lisboa- me dice Cintia.
-Yo tampoco- casi daba saltitos de la alergia.
-Viste que no es cornuda- le dice Cin a Alex.
El rodó los ojos.
-Puede venir teniendo a otra.
-Boe- dije yo.
Estos días está insoportable.
Preparé lo que pidió Enzo y se lo llevé.
-Gracias morocha.
-Extrañaba tu vos en persona.
-Yo te extrañaba entera.
Y entre chamuyos Enzo estuvo en la cafetería hasta las 21 esperándome.
Salimos y de la mano fuimos hasta mí casa. No sé cómo no nos cruzamos a ningún periodista la verdad.
-¿Por cuanto te quedas?- le pregunté cuando llegamos a casa.
-6 días.
-¿Nada más?- hice un puchero.
-Solo pude pedir una semana y encima me pase 1 día entero viajando.
Me abrazó.
Inhale su perfume y no pude evitar sonreír. Ni yo sabía realmente cuanto lo extrañaba.
-No quiero soltarte más.
-No lo hagas, vení a Portugal conmigo.
Suspiré.
-Lo voy a tener en cuenta más que nunca ¿Si?
-Esta bien- dio un beso en mí cabeza.
Sabía que no es la respuesta que el quiere, pero también se que me entiende y no me va a obligar a ir con el.
-Amorcito- me dijo cuando nos acostamos en el sillón.
-¿Si?
-Te quiero comer a vos pero también quiero dormir.
-Ay nene- me reí.
Enzo y yo nunca tuvimos relaciones en lo que llevamos juntos, me daba un poco de vergüenza la verdad.
-Hoy dormí gordo, viajaste mucho para venir y todavía tenemos más días para estar juntitos.
Me sonrió.
-Pero duermo con vos.
-Obvio.
Se levantó y me alzó cual costal de papas para llevarme a la pieza, cuando entró cerró la puerta tras el y antes de tirarme en la cama me dio una palmada en el culo.
-ENZO.
-¿QUE?- me tiró en la cama y se tiró encima mío.
-Mi culito- me reí.
-MI culito querrás decir- cómo pudo llevó su mano a mis glúteos y apretó.
-Sos un caso perdido vos ¿No?
-Perdido en vos estoy.
Enzo romántico te amo.
-Sos un chamullero.
-Solo con vos.
Y no pude contenerme.
-¿Y con Lana?
El me miró sorprendido.
-¿Celosa mí morocha linda?
-Puede ser.
-Te amo tanto- y me besó.
Le correspondí odiandome por dejar que me distraiga de mí pregunta inicial. Cuando salí del trance Fernández corté el beso.
-Respondeme.
-Lana es una pelotuda y me la quiero sacar de encima ya mismo.
Sonreí.
-¿Y que más?
-No sé compara ni un poco con vos.
Mí sonrisa crecía.
-¿Algo más?
Me agarró fuertemente de la cintura y rodó sobre mí cama para dejarme encima de el.
-Ella no me provoca las maripositas que me provocas vos.
¿Enzo Fernández acaba de decir que le provoco mariposas? Me muero.
-A ella no la amo, a ella no la quiero besar, ella no me importa en lo más mínimo.
Su tono de voz fue bajando hasta susurrar en mí oído.
Okey, esto me está haciendo subir mí temperatura corporal.
Dejó un húmedo beso en mí cuello.
Jadee en su oido dejando en visto mí excitación.
-Me parece que ya no quiero dormir- volvió a susurras pero esta vez contra mí cuello volviendo a dejar besos en esa zona.
-Creo que yo tampoco.

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Parte 2 del especial por el cumple del bello Enzo

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El siguiente es un +18, les aviso 😉