/Male/
Hoy es el partido contra Australia ¿Estoy preocupada por el resultado? Obviamente, cada partido se vive con la adrenalina de una final, si perdemos chau sueño.
El entrenamiento estaba por terminar, los chicos apenas iban a tener tiempo de ir al hotel a buscar algunas cosas y después teníamos que ir directo al estadio.
-Chicos- los llamó Scaloni y todos se acercaron haciendo un círculo en la cancha -yo se que a algunos les preocupa la altura de los jugadores de Australia, pero acá eso nos chupa un huevo, el futbol no es básquet.
Todos gritaron alentandose entre ellos.
Nos fuimos al hotel y cada uno subió a sus habitaciones a buscar sus cosas.
-Estoy nervioso otra vez- Enzo me miró apenas entramos a la pieza con cara de asustado.
Me acerqué y agarré su cara con mis dos manos.
-Tenes que dejar ir esos nervios chino, vos sabés que jugas re bien, todos lo sabemos. Tenés que confiar en vos y en tus habilidades.
No dijo nada, solo me miró. Me acerqué más para darle un corto beso.
-Van a ganar, vas a seguir siendo un re jugador, y la gente te va a amar más de lo que ya te ama.
-Ese es el problema Male ¿Y si cuando ya todos me aman yo la cago y me odian?
-Ay Jeremías, sabes cómo es la gente, siempre critican a todos por el más mínimo error que cometen sin tener en cuenta todo lo bueno que hicieron antes, vos no les tenés que hacer caso. Acá todos sabemos lo bueno que sos y eso es lo que importa.
Enzo sonrió y me abrazó.
-Bueno ¿Vamos?- me preguntó agarrando mi mano.
-Me tengo que bañar, ya le avisé a Rodri que voy después con Tini en taxi.
Tini llegó a la madrugada, por lo que estuvo en un hotel cerca al nuestro durmiendo toda la mañana y la tarde, mi trabajo es ir a buscarla para que vayamos juntas al partido.
Enzo hizo puchero.
-¿No vas a estar en la concentración en los vestuarios?
-No, pero te voy a estar mirando siempre a vos en la cancha- le sonreí.
-Con saber que me estás mirando ya tengo toda la fuerza que necesito para correrme la cancha entera 100 veces- me dió un beso -entonces yo ya me voy, que si no me empiezan a retar viste.
Agarró el bolso con sus cosas y me dió un último beso antes de irse de la habitación. Yo suspiré <ese hombre me vuelve loca>
Me bañé, me sequé el pelo y me puse un pantalón negro con la camiseta de Enzo. Me miré el espejo y no pude evitar sonreír. Hasta que mi hermano llegó a mi cabeza.
<Seguro me va a salir con alguna pelotudez cuando me vea con la camiseta de Enzo> salí del baño <mientras Lean no diga nada Rodri debería creerme a mí> agarré mi celular y mi mochila con las cosas indispensables para llevar al partido, curitas, vendas, una botella de agua, una barrita de cereal y un bombón de chocolate, nunca se sabe cuándo me puedo lastimar o se me baja la presión. <Además ahora que está Tini acá seguro mi hermano va a estar más distraído y me va a dejar de joder un poco> salí de la habitación y bajé, el hotel de Tini quedaba a poco menos de 5 cuadras, la llamé mientras iba en camino.
-Holaa- saludó con un tono alegre.
-Que ondaa. ¿Ya estás lista? Estoy yendo para tu hotel.
-¿Lista? Boluda, ya estoy abajo esperando a que llegues, creo que me emocioné un poco.
Las dos nos reímos.
-Bueno, esperame que en un ratito ya llego.
Le corté la llamada y seguí caminando, cuando llegué efectivamente Tini estaba sentada esperándome.
-MALE- gritó cuando me vió.
-TINI- grité yo y las dos corrimos a nuestro encuentro.
Quien la fue a buscar al aeropuerto fue Rodri, así que yo todavía no la había visto.
Nos abrazamos y después subimos a un taxi que estaba afuera del hotel.
Ya sentadas en el auto Tini me quedó mirando, más bien quedó mirando la camiseta que tenía puesta.
-Epa epa ¿Y eso?
Le había contado que me llevaba mejor con Enzo, pero no le había contado que teníamos algo, tampoco que me había dado su camiseta, y mucho menos que me dedicó un gol.
-Me la dió después del partido con Polonia- dije restándole importancia.
-Mmm ¿Y no te parece raro que te haya dado su camiseta?
La miré <¿Le digo o no le digo? Es mi mejor amiga, y es más confiable que Lean, si le dije a Lean por qué no decirle a ella> levanté mi meñique para que haga una promesa, ella miró mi mano extrañada.
-¿Que tengo que prometer?- preguntó confundida.
-Lo que se habla en el taxi, se queda en el taxi.
Entrelazó nuestros meñiques y sin separarlos hablé.
-Tengo algo con Enzo, me regaló su camiseta y me dedicó el gol que le hizo a México- lo dije todo seguido y hablando más rápido de lo necesario.
No podía explicar la expresión de mi amiga, tenía cara entre asustada, emocionada, confundida y como si estuviera a punto de gritar. <Tal vez fue demasiada información en muy pocos segundos>
-MALENA COMO NO ME DIJISTE ESO ANTES.
-BUENO MARTINA NO ERA ALGO PARA CONTAR POR TELÉFONO.
-¿Osea que planeabas decirme recién cuando vuelvan a Argentina?- preguntó indignada.
-Puede ser- me reí nerviosa -igual, no tenemos una relación formal.
-¿Por qué?
-Porque ninguno sabe lo que siente exactamente y no queremos ponerle título a algo que ni nosotros sabemos que es.
Tini me miró con los ojos entrecerrados.
-Nunca en tu vida usaste una camiseta que no fuera la de Rodri, incluso antes de que juegue en la selección.
-Bueno, pero esta vez es diferente. Además me gusta más el color de esta camiseta.
-¿Te gusta el color o la persona que te la dió?- sonrió.
Rodé los ojos y las dos nos reímos.
Cuando llegamos al estadio fuimos directamente a la zona vip. El partido iba a empezar en 30 minutos. Cuando llegamos los chicos todavía estaban entrenando. Unos minutos después de que llegamos noté como Enzo miraba hacia donde estábamos y al verme sonreía, no pude evitar hacer lo mismo.
-AY BOLUDA TE ENCANTA- me gritó Tini.
La miré mal.
-NO ME GRITES.
-A MALE LE GUSTA E- le tapé la boca.
Si bien había poca gente en esa zona por el momento, podía haber algún periodista que la escuche y arme un escándalo.
-Callate pelotuda.
-Perdon, mala mía- se disculpó.
El partido empezó, estaba peleado pero dominaba Argentina.
Minuto 35' gol de Messi, Tini y yo saltamos de la silla y nos abrazamos.
Empezó el segundo tiempo, minuto 57' gol de Julián, el partido iba 2-0 toda la tribuna argentina estaba saltando y alentando.
Minuto 77' un australiano pateó y la pelota pegó en el pecho de Enzo, fue directo al arco y el dibu no pudo atajarla, gol en contra. Argentina 2 Australia 1.
Llegaron a los 90 minutos y sumaron 8.
-EEE ¿POR QUE 8? NADA QUE VER- se quejó Tini a mi lado.
Minuto 96' y el dibu se convirtió en héroe otra vez, hizo una atajada increíble que nos salvó del empate.
-EMILIANO TE AMO- grité.
El partido terminó. Estábamos en cuartos.
Tini y yo fuimos rápidamente a los vestuarios a esperar a los chicos, que todavía estaban en la cancha festejando.
Cuando entraron nos saludaron, Rodri se fue específicamente a saludar a Tini y todos empezaron a gritarle cosas.
-BUENOOO RODRI GANADOR.
-YA TIENE NOVIAAA.
-PARÁ FESTEJA PRIMERO CON LOS PIBES POLLERA.
Mi hermano los miró mal.
Pude ver a Enzo, estaba festejando, pero la felicidad no llegaba del todo a sus ojos. Supuse que fue por el gol en contra.
-Estamos en cuartos muchachoooooos- gritó Otamendi.
Todos empezaron a gritar y saltar.
Miré para donde estaban Tini y Rodri, seguían abrazados <estos dos ya tienen algo y no me contaron> fue lo primero que pensé.
Después de festejar nos fuimos al hotel.
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Mí Mujer (Vos y Enzo Fernández 💕)
FanfictionIntento de fanfic o algo así de Enzo Fernández y la scaloneta