⏳️Under the blancs light⏳️ /Kunessi🇦🇷

🥀Parte de una pesadilla🥀

Octubre 21 / 2018 Inglaterra 7 A.M

Me desperté sobresaltado en mi cama y sentía que mi pecho dolía, una sensación extraña estaba apoderándose de mí.
Había tendido una especie de sueño, pero no podía recordarlo.
Me levanté apurado para deshacerme de la sensación horrible y me sujete ante un mareo del borde de la pileta del baño, miré mi rostro sudoroso en el espejo y podía verme pálido y con la respiración agitada.

Comencé a controlar mis respiraciones para calmarme y de a poco recobrar la compostura.
Di mi última respiración y pensé que sea lo que haya sido, fue solo un sueño.

Aproveche mi abrupto despertar para tomar el entrenamiento de la mañana, yo no era muy madrugador, por lo que siempre optaba por el de la tarde.
Pero hoy sentía que necesitaba deshacerme de ésta sensación espantosa y nada mejor que entrenar.
Tuve la extraña sensación de querer escuchar la voz de Leo, venía sucediendome seguido, el querer hablar con él o escucharle.
Pero si quería llegar al entrenamiento tenia que darme prisa, agite mi cabeza ante mis pensamientos de Leo y tomé mi bolso con mis cosas y salí en dirección al Polideportivo del Manchester.

A las pocas horas todos los medios de comunicación posibles estaban activos.
En toda España y en el resto del mundo no se hablaba de otra cosa.

Hubo quienes lo recibieron por teléfono, por televisión, por el periódico o por amigos, pero todos lo supieron a las pocas horas.

El gran futbolista Lionel Messi había sido atropellado por una camioneta y estaba en estado crítico en el hospital.
No solo su carrera, sino su vida corría serio riesgo.

Polideportivo Manchester City.

El entrenamiento de la mañana estaba llegando a su fin, faltando aún el último cuarto de hora para su conclusión.
Para Sergio hubiera terminado antes.

No se dio cuenta de la llegada apresurada de uno de los secretarios del club, ni siquiera se dio cuenta de lo alterado y ahogado que estaba el chico diciendo algo directamente al oído del señor Pellegrini.

En ese momento Sergio estaba pensando como todos sus compañeros en jugar ese último cuarto de hora, en la que probablemente fue la mejor parte del entrenamiento.
Acababa de recibir un balón perfecto de David y de cara a portería tuvo que parar para encarar a Vincent.
Por supuesto, el entrenador siempre puso a su defensor más fuerte en su contra, por lo que no solo tuvo que trabajar duro para vencerlo, sino que también tuvo que tener cuidado de no ser asesinado accidentalmente por su compañero y amigo.

Nada personal, dijo después cuando por desgracia le hizo volar por el campo tras haberle quitado 'suavemente' el balón la última vez, pero ya sabía sus estrategias y no pasaría 2 veces.

No esta vez no fue así, Sergio estaba especialmente en forma esa mañana ya que estaba jugando con su 110% intentando deshacerse de su extraña sensacion y de sus pensamientos especialmente negativos esa mañana.
Con esfuerzos consiguió pasar ileso al defensa, acababa de rematar, cargaba su típico remate a portería cuando el pitido prolongado y seco del entrenador le hizo fallar.
- SERGIO! tronó Pellegrini tras sacarse el silbato de la boca.

Agüero sujetó su cabeza con ambas manos al ver la pelota pegar en el travesaño y salir afuera.
Había sido un tiro perfecto, removió sus cabellos frustrados y podía sentir como su pecho le dolía.
Algo estaba pasando y no entendía que, se giró luego de suspirar unas cuantas veces para aliviar su frustración.

Solo entonces el joven delantero del Manchester City notó la presencia de uno de los asistentes del club y peor aún la extraña expresión del entrenador.

La sensacion no fue nada cómoda.

Era uno de esos rostros graves y serios. No era de los que bromeaba mucho, al contrario, solía tener la misma expresión sombría por naturaleza, pero ya habían aprendido a distinguirlos.
Esa fue una de esas caras. Cuando das malas noticias, cuando definitivamente algo anda mal.