Emma Dixon

Capítulo 17: Derrumbada.

Narra Emma.

Llegamos a mi casa. Rebusco en los bolsillos las llaves, pero parece que me las he dejado dentro de casa.

En otras circunstancias, quizá habríamos trepado por el árbol hacia la ventana entre risas.

Pero no. Nuestros amigos piensan que somos unos traidores mentirosos. Una lágrima amenaza con salir, pero la retengo.

-Ty, no tengo las llaves –le susurro.

-Tranquila, llevo las mías.

Suspiro aliviada. Abre la puerta.

-Pasad, chicos.

A regañadientes, sobre todo Hannah, lo que me deprime aún más, pasan todos y se sientan en el salón.

Entonces, nos sumimos en un incómodo silencio.

¿Y de qué vamos a hablar?

Ojalá y esto no estuviera pasando. Ojalá y estuviésemos todos tomando algo, mientras Tyler, Christian y yo les contamos todo lo que hemos vivido y ellos nos cuentan cómo han ido estos últimos tres meses por aquí.

-¿Les queda mucho a tus padres para llegar? –pregunta Chase incómodo.

Pero un ruido en la puerta nos aclara que no hará falta esperar más.

-Tyler, Christian, Emma, ya estamos en casa –grita mamá.

Nadie hace ningún ruido.

-No están. ¿Y si han vuelto con sus amigos, Mark?

-¿Y qué si lo han hecho? Después de todo, no los han visto desde hace tres meses, Linda.

Mamá calla, lo que nos da a entender que papá no está al tanto de lo que ella ha hecho.

-Pero... bueno, tú sabes. Los enviamos al internado para alejarlos.

-Bien sabes tú también que no es una decisión que me encantase, y te lo dije. Te apoyé porque me convenciste, pero lo hice con la condición de que pudiesen verlos en sus vacaciones. Estoy de acuerdo en que su actitud con nosotros no es la mejor, pero no sé si hicimos bien.

Oímos que vienen hacia aquí.

Ambos, en especial mi madre, se quedan petrificados al vernos a todos aquí.

-¡Hola, chicos! ¿Qué tal todo? No sabíamos que estabais aquí –dice mi padre con naturalidad.