[7]

223 12 0
                                    

Mire a Billie mucho más seria de lo normal, es raro que  ella que no hable durante el camino.

Supongo que no tuvo una buena noche.

-¿Estás bien? - le pregunté con cautela.
-Si.

Asentí y decidí no preguntar mas sobre el tema.

-¿Hiciste el trabajo?.
-¿Cuál?.
-Mate.
-No.
-¿Quieres que te lo pase?.
-No gracias.
-¿Oye en verdad estas bien?.
- Si.

Asentí y me mantuve en silencio hasta que llegamos a la escuela.

-Gracias por traerme - asintió.

Salí del auto pero ante de cerrar la puerta le hable.

-Si necesitas hablar conmigo sólo tiene que decirlo.

Cerré la puerta del coche y camine hacia la entrada.

-¡Jenna espera! - me gire y mire a Billie corriendo hacia mi.
-Dime - ella llegó a mi lado.
-¿Es verdad lo que dijiste en el coche?.
-Si.

Suspiro un poco.

-¿Podemos hablar en otro lado?.
-Claro.

Ella giro y comenzó a caminar hacia el coche.

-¿Billie a dónde vas?
-No voy hablar de lo que me pasa aquí.
- Bien entonces....
-Sólo, ven conmigo .

Mire hacia la entrada.

Un día no creo que me afecte.

Sin decir nada comenze a caminar en la misma dirección que ella.

Ambas nos subimos al coche y ella arrancó el carro.

-¿A dónde vamos?.
-A mi lugar.

El camino fue silencioso, ella realmente parecía tener un problema serio.

La miraba de reojo tratando de entender su ánimo, tratando de entenderme el porque me estoy preocupando por ella.

Al llegar al lugar apago el motor y salió del coche para sentarse en el cofre del carro.

Imite su acto y quedamos en silencio por un momento.

-¿Alguna vez te has preguntado porque soy así? - la mire.
-Algunas veces.
-Yo también me lo pregunto todos los días - soltó un suspiro - Aveces suelo recordar esas veces en las que era tan amable con los demás.
-¿Por qué me dices esto? - me miró de reojo.
-Solía ser como tú eres.
-¿Por qué dejaste de serlo?.
- Dicen que una persona puede cambiar si sucede algo que marque su vida.
-¿Hubo algo que marcó tu vida?.

Encogió sus hombros y asintió.

-¿Fue tan grave para que cambiaras?.
-Cada noche recuerdo ese día, recuerdo mis emociones, la forma en la que sucedió todo, suelo recordarla...

Me miró un poco y mire sus ojos llenos de lágrimas.

-Suelo sentirme sola muy a menudo, ella era mi compañera de aventuras, ella siempre estuvo conmigo sin importar lo que sucediera.

Miró de nuevo hacia enfrente.

-¿Qué le sucedió? - pregunté y ella cerró sus ojos con fuerza.
-Se fue.

Dio un suspiro y se mantuvo en silencio por un largo tiempo.

-Jenna - la mire.
-Dime.
-¿Puedo abrazarte?.

Asentí.

Ella se acercó a mi cuerpo.

Me gire y abrí mis brazos.
Se acercó con lentitud y me abrazo con fuerza.

Cuando te conocí. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora