Últimos dos capítulos.
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Estire mis brazos y solté un bostezo. La vida adulta si que es difícil.
Apague la computadora y me quite los lentes.
-Amor - mire a Billie entrar.
-¿Cómo te fue? - se acercó y dejó un beso en mis labios.
-Muy bien, ya está todo listo.
-Me da gusto cariño.
-¿Has terminando de trabajar?.
-Sí.
Ella se sento en el escritorio y me miró.
-Ya que mañana descanzas podemos salir algún lugar.
Acaricio mi mejilla y sonreí.
Acerque mi mano a su pequeña corbata que trae puesta y la jale hacia mi.
-Te ves tan sexi - mire sus labios - ¿A dónde quieres ir?.
-Nuestros padres se van a reunir manaña, dijeron que quieren vernos.
Mire sus ojos y sonreí.
-Podemos ir un rato , hace días que no los visitamos.
-¿Ya cenaste? - negué - ¿Hiciste algo?.
-Macarrones - se lamio los labios y sonreí.
-Vamos a cenar.
-Vamos.
Caminamos a la pequeña cocina del departamento el cual hace dos años rentamos.
Cuando termine la universidad espere a Billie para poder irnos a vivir juntas.
5 meses después de que ella terminará rentamos éste departamento.
-¿La próxima semana iras a la oficina?.
-Yo creo que si.
-Bien.
Ella dejó un beso en mi cuello.
-¿Tú iras a la oficina?.
-Tengo la semana a libre - mordió mi cuello - Terminaré los planos que me quedan.
-Esta bien.
Siguió abrazada a mi cuerpo.
-Esos macarrones huelen deliciosos.
-Son los que te gustan.
-Te amo - sonreí.
Todos estos años a su lado han sido tan increíbles.
-Lauren mando mensaje - apague la estufa - Los chicos quieren que nos reunamos.
-¿Qué día?.
-No saben, quieren saber que día podemos.
-El próximo fin de semana no tenemos ningún compromiso.
-Entonces el próximo fin de semana.
-Bien.
Me abrazo con delicadeza y sonreí.
-La cena está lista.
Me ayudó a poner todo y nos sentamos a cenar.
-Deberíamos tomar unas vacaciones.
La mire y sonreí.
-Podríamos ir a la playa.
-Suena una buena idea.
-O podemos ir a las montañas.
-A dónde quieras ir esta bien.
-Esta bien cariño.
Seguimos comiendo entre pláticas y uno que otro beso.
Recogimos todo y fuimos a la cama.
Mientras miramos la televisión, ella se encarga de acariciar mi estómago bajo la blusa del pijama.
-El día de hoy Richard me mostró la foto que le tomó a su esposa - subí mi mirada - Ella tiene seis meses de embarazo.
-Que lindo.
-A mi mente llego la imagen de ti embarazada - sus ojos brillaron.
-¿En cerio?.
-Sí nena.
Sonreí y acaricie su mejilla.
- ¿Algún día sucederá verdad? - me miró con una sonrisa y asentí.
-Pasará cariño.
Beso mis labios y me dio la vuelta para quedar sobre mi cuerpo.
-Deberíamos hacer un bebé ahora mismo.
-¿Ahora?.
