Trozos #1: Kintsugi, el arte de querer nuestras cicatrices.

Especial: Recuerdos

Hay personas que causan un gran impacto en nuestra vida, esas que tienen un alma tan pura, que ni con millones de personas podrás llenar el vacio que dejan en el corazón, cuando ya no están con nosotros.

Esas personas que te levantan cuando caes. Que están ahi cuando no puedes más. Que te sacan más de una sonrisa y limpian tus  lágrimas. Esas personas que luchan por lo que quieren y jamas se rinden.

En honor a Alfonso Mujica y Amparo Garcia, gracias por ser luz de mi mundo.

Dedicado a todas esas personas que son luz y a todas esas que lo fueron, que su alma siga brillando por la eternidad.

Especial

Recuerdos

Sin saber cuanto tiempo habia pasado, me levante del piso con el escocer en mis ojos y mi garganta atorada por las lágrimas. 

Me dezplace por toda la sala y subi las escaleras, observando el juego de cuadros que colgaban sobre la pared, era una especie de rompecabezas, un cuadro conectaba al otro y ese cuadro a otro, y asi sucesivamente, de manera descreciente, hasta formar una pieza en total armonía.

Recuerdo el motivo por que los hice y los pinte de esa manera. Estaba enojada con mi padre y necesitaba drenar el enojo de alguna forma. Esto era mi escape.

《Limpie con un trapo el restro de pintura que quedaba en mis manos. Ahora si, a esperar que se sequen seis cuadros.

—¿A que se debe hoy?  —Belén se unio sentandose a un lado en el piso. Observo todos los cuadros.

—Mi papá rompio los platos, los favoritos de mamá —explique los motivos del porque habia decido pintar eso, aunque para ella no era nada nuevo ya que siempre habia una historia detrás de cada trazo que hacia.

—Si ya decia yo, que los platos no volaban —comenzo a reir, tapandose la frente con su mano, nego con la cabeza—  ¡Ay! ¿Que cosas?

Volvió a reir, esta vez, con más fuerza sacandome una sonrisa.

—Sabes, podrías sacarle un mayor provecho a esto, la gente mataría por tener tu arte.

—Dudo que esto le gusta a alguien —rodé los ojos.

—¿Como dices? —se llevo una mano al pecho, haciendose la ofendida— Si yo lo amo》

Fui idea de Belén colocarlos en esta pared. Siempre tenia las mejores ideas.

Las lágrimas salian por si solas de mis ojos, no hacia falta ni que hiciera el menor esfuerzo. El pecho me dolia.

Al fin llegue a arriba y segui hacia el salón principal o... al menos asi lo llamaba yo.

Toda la vida pensé que esto podia ser el salón de baile de un castillo, donde se podría realizar una fiesta gigante con miles de invitados.

Era un espacio abierto y muy amplio. Y donde yacian mi cuadros más grandes, sin duda, era mi segundo lugar favorito.

《—Ven, vamos a bailar  —en la radio sonaba "Una gran fiesta" de Olga Tañon.