Capítulo 32 ~ Navidad.
Viajar en autobús a Daegu quizás no era lo más cómodo, pero viajar en compañía de una persona especial lo era todo. Era asombroso como se podía olvidar el alrededor, al estar con alguien que tuviera una influencia tan positiva que creara el mejor ambiente para que las cosas malas se fueran y solo importaran aquellas que aportan lo mejor a la vida.
Taehyung acomodó su cabeza en el hombro de Jungkook durante cuarenta minutos de viaje. Luego comieron algo y en las horas que faltaban se durmieron ambos, esta vez Jungkook apoyando su cabeza en el hombro del mayor.
Así fue como llegaron a la ciudad natal de Taehyung con maleta en mano, y con efectivo para pedir un taxi que los dejó frente a la casa del castaño.
Jungkook lo miró, escuchando al auto alejarse. Taehyung al verlo, no pudo contenerse y aunque estaba al frente de su casa y cualquiera los pudiera mirar, sostuvo el rostro del menor entre sus manos y presionó sus labios sobre los de él, en un beso corto pero profundo.
—¿Estás nervioso? —preguntó el mayor acariciando su espalda.
—Un poco si —Jungkook pareció pensarlo durante unos segundos —bueno en realidad siento que me voy a morir de los nervios, pero eso no es mucho ¿o si?
Taehyung le pellizcó una mejilla —ya los conoces cariño, solo actúa como siempre y déjame a mí decirles, tú no tienes que hacer nada, solo quédate a mi lado.
—Me parece bien, no nos separemos —acordó en un asentimiento y luego siguió a Taehyung hasta quedar frente a la puerta y una vez allí el castaño tocó el timbre.
Enseguida la puerta se abrió dejando ver a Teah que los recibió con un muy cariñoso abrazo, luego le siguió Lina y Taoh, saludando muy entusiastamente y por último los padres de Taehyung, quienes enseguida los miraron poniéndolos un poco nerviosos, pero Jungkook trató de sonreír ampliamente y corresponder el saludo.
La familia de Taehyung sabía que él los iba a visitar esa navidad porque el castaño había prometido antes de irse a la universidad, que haría lo posible para estar allí en los festejos de fin de año. Pero la presencia que no esperaban era la de Jungkook, por lo que no pudieron evitar sorprenderse, sin embargo no lo tomaron a mal, al contrario, estaban agradecidos con él por mostrarle su apoyo incondicional al castaño.
Sin embargo mientras Ha Na ponía la cena en la mesa, con ayuda de Sufjan y de Taehyung, no podía evitar robarle miradas inquisitivas a Jungkook, porque a pesar de que él chico le parecía de las personas más agradables que había conocido, no podía no preguntarse por qué él estaría allí.
Pero trató de ignorar ese pequeño pensamiento que no la dejaba estar tranquila y se dispuso a tomar asiento cuando terminaron de poner la cena.
—¿Cómo has estado papá? —preguntó Taehyung totalmente interesado, porque es lo que normalmente le preguntaba a sus padres y porque se preocupaba debido a sus antecedentes de problemas cardíacos.
—Estoy bien, no he vuelto a tener un infarto si es lo que te preguntas —bromeó haciendo reír a los que estaban en la mesa. Jungkook lo miró notando de donde había venido tal picardía de Taehyung.
Así fue como la cena consistió en una conversación cotidiana bastante animada que hizo que tanto Taehyung como Jungkook se relajaran un poco, aunque no por mucho pues más pronto que tarde las horas corriendo y los hermanos de Taehyung se fueron a sus habitaciones, al igual que su abuela, quedando solo ellos con los padres de Taehyung en la sala.
Y quizás hubieran podido sentirse un poco más cómodos porque no tenían planeado decirle nada ese mismo día, si no que habían acordado hacerlo al día siguiente cuando surgiera un momento tranquilo, sin embargo surgió el tema de donde dormirían y así fue como las cosas se pusieron un poco incómodas.
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My Dear Roommate
Fiksi PenggemarSiete chicos con diferentes sueños unen caminos en un pequeño apartamento en la gran ciudad de Seúl con la cualidad de que todos son totalmente diferentes, poniendo en riesgo así lo que podría ser la mejor convivencia. Taehyung y Jungkook no son la...