Las despertó el sonido del despertador, inmediatamente se pararon para apagar el irritante sonido que retumbaba por toda la habitación.
Una vez que ya se habían parado se fueron a la cocina para hacer su desayuno.
-Ahhh, ayuda no encuentro mis abrigos- gritó Amelia frustrada, hacía 10 minutos que Inés estaba sentada en la cama ya terminada de arreglar mirando como su mejor amiga gritaba del estrés al no encontrar su abrigo.
-¿¡Como chingados no esta aquí mi chamarra si aquí la deje ayer?!- volvió a preguntar más para sí misma que para alguien más, la ojiturquesa levantó la vista de su celular y solo se encogió de hombros, volviendo la vista a este.
En ese momento entró por la puerta de la habitación Sofía, y detrás de ella llegaron el resto de las chicas
-¿Qué pasa que no vienen?- Pregunto Daiana mirando su reloj preocupada.
-Ame no encuentra su campera- explicó con soltura Inés levantándose de la cama para dirigirse a la puerta
-¿La que tiene una pluma en la espalda?- preguntó Renata, a lo que la rubia asintió
-Ah la tenemos nosotras, te la íbamos a dar cuando llegaras a la puerta, te la olvidaste ayer en la clase entonces la guarde yo- Respondió con simpleza la misma
-¿¡Y NO SE LES OCURRIÓ DECIRME?!- Exclamo Amelia al borde del colapso
-Eso importa ahora, porque si no nos apuramos ya, lo que vamos a perder va a ser la clase- Dijo Inés entrando por la puerta rápidamente sujetando el brazo a su mejor amiga llevándola a la puerta.
Al llegar a la escuela, dejaron sus bicicletas en la entrada rápidamente mientras corrían a sus clases, solo cuando llegaron cada uno a la correspondiente se detuvieron a respirar.
Por suerte del destino ni bien se sentaron sonó la campana, y el profesor entro.
-Buenos días, alumnos. Espero hallan llegado bien a clase, el día de hoy me dedicare a terminar de corregir las pruebas que hicieron. Por lo tanto, pueden tener una especie de hora libre pero sin hacer ruido- Dijo el profesor, remarcando lo ultimo -Al primero que escuche haciendo problemas lo mandare a la oficina de la directora, y todos se pondrán a hacer ejercicios del libro- Al escuchar esto último se escucho un sonido de queja general por todo el aula, que el profesor inmediatamente mando a callar, así que al final se conformaron e hicieron silencio.
El resto de la clase fue tranquila, el profesor termino de corregir la pruebas y se dedico a entregarlas, los jóvenes del clan estaban felices, no se podían quejar, les había ido muy bien para ser un examen de final de semestre.
Además comparando a otros que a otros alumnos les había ido muy mal, llegando a tener que suspender la materia.
Los deleito el sonido de la campana, anunciando el fin de esa clase y el inicio del receso, todos los alumnos se levantaron apresurádamente de sus asientos, ignorando casi por completo al profesor que decía sobre la tarea que tendrían que hacer para el fin de semana y entregar al inicio de la semana siguiente.
Los jóvenes del clan Sirena y el clan Fénix se dirigieron inmediatamente a la biblioteca, para encontrarse todos.
Al llegar se pusieron a hacer la tarea del profesor, o más bien empezarla, no era tan complicada solamente que no querían hacerla durante el fin de semana, aún así no la llegaron a terminar, porque les interrumpió el sonido de la campana anunciando el inicio de la siguiente clase.
-¿Qué tenemos ahora?- pregunto Lucas mientras cerraba su libro y juntaba sus apuntes
-Yo tengo química, y creo que los otros tienen historia- Respondió su prima imitando su acción
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Los 13 Recluidos
General FictionEn dos familias de clanes totalmente opuestos pero ligados uno con el otro, se encuentran 13 recluidos, niños parte de estos clanes que son rechazados por su familia por diferentes razones. Sus protagonistas Zoe e Inés se enamoraran y junto con los...