Cap XII

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Esa mañana de sábado, Apolo hizo su salida bastante temprano para dar comienzo a un hermoso día soleado.

Aún así, gracias a que estaban en ese fuerte de mantas el sol no les llegó y los dejo dormir bastante.

La marcha iba a tener lugar a la 1 y media de la tarde en una plaza cerca de allí, así que tendrían tiempo de sobra.

Pero aun así no se iban a despertar tan tarde ya que como la marcha terminaba recién a las 5 de la tarde, aún necesitaban unas horas para arreglar todo para la fiesta de cumpleaños de los gemelos.

Como ya era costumbre la mayoría se despertó temprano, cerca de las nueve y media.

Mientras que los tres dormilones de siempre se quedaron durmiendo, sólo que a estos se les sumó el nuevo cuñado de la familia Quiz que seguía dormido.

Esta vez, gracias a su presencia no les jugaron una broma, porque Lucas se negó rotundamente a que molestaran a su novio o le hicieran algo.

Además que desde la broma de la otra vez, tenían una deuda con ellos y no querían otra.

Más o menos una hora después, habían terminado de hacer los carteles y de preparar todo para esta, ya que como habían ido a tomar un helado el otro día, no lo pudieron terminar.

Así que ya cómo casi eran las once fueron a tomar el desayuno, entonces se encaminaron a la cocina.

Cuando habían empezado a sacar todas las cosas para hacerlo, se cerró una ventana de golpe, generando un estruendo, cosa rara ya que casi ni corría viento, y los jóvenes del Clan Fénix lo hubieran sentido de ser así.

Entonces, un escalofrío les recorrió la espalda, y no el tipo de escalofrío cuando uno tiene frío, era el tipo de cuando tiene miedo. O una sensación de mal augurio.

En ese momento, empezaron a escuchar un sonido de una melodía, como una canción, y segundos después el susurro de una canción infantil.

A este punto estaban temblando de miedo, y aún más cuando una cortina se cerró y se puso más oscura la vista, dificultando un poco ver a su alrededor.

Cuando de repente sintieron como unas personas los atacaban, Amelia sintió como unos brazos la rodeaban, así que soltó un grito y pego un puñetazo hacia atrás por instinto.

Un puñetazo que por suerte la persona de atrás esquivo, haciendo también que la rubia pudiera ver unos inconfundibles mechones azules a su espalda.

-¡¡¡INÉS, CHICOS!!! ¡¡¡NO JODAN, NOS VAN A MATAR DEL SUSTO!!!- dijo la misma, con una mano en el pecho tratando de recuperarse, de la broma y girando a ver a sus 'atacantes' (que no eran otros que sus amigos), los cuales no paraban de reír. Al final los ayudaron con el desayuno y mientras se terminaba de hacer se fueron a arreglar.

Al llegar de nuevo a la cocina, encontraron un montón de café con leche y tarta de frutas hecha.

Así que luego de desayunar se dirigieron hacia el vestíbulo en el que sería el cumpleaños, y se decidieron a empezar a arreglar para no tener que hacer todo el trabajo al regresar.

-¿Cuál es la temática?- pregunto Jack mientras colocaba un cartel que decía en letras grandes 'Feliz Cumpleaños' y tenía unos adornos al rededor y listones azules a los costados.

Los 13 RecluidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora