Los 13 Recluidos

Cap XXI

Los rayos de sol asomaron por la ventana y caían delicadamente sobre la cama. Ambas chicas se encontraban acostadas en la cama.

Zoe se despertó cuando la luz llegó a su cara, miró el reloj y vio que eran las diez y media. Giro y se volvió a acostar un poco desorientada, hasta que se percató de que Inés estaba a su lado.

La sirena dormía pacíficamente, y no parecía tener intenciones de despertarse, Zoe tampoco tenía ganas de levantarse así que se quedó en la cama acostada sobre el pecho de la otra.

No supo si se quedó dormida de nuevo, pero, para cuando abrio los ojos de nuevo ya eran las once y cuarto e Inés no se había despertado.

Así que se separó de ella con cuidado, procurando no despertarla, pero no tuvo éxito ya que una mano en su cintura le impidió levantarse.

La latina abrió los ojos despacio, y al percatarse del lugar en el que su mano se encontraba la quitó rápidamente

-Buenos días- comento risueña la pelirroja

-Buenos días- le respondió con la voz ronca, para volverse a tirar en la cama

-Vamos, levántate, hay muchas cosas para hacer hoy, es un día hermoso- la castaña soltó un gruñido

-Suenas igual a Amelia- se quejo, para luego soltar una risa y levantarse

Ambas se dirigieron al baño y una vez cepillados sus dientes fueron a la cocina

-Tus primas no piensan volver, ¿verdad?- pregunto Zoe, mientras sacaba una taza para preparar café

-No, te dije; pasaran el finde semana donde mis primos, así nos dejaran el departamento para nosotras- contestó Inés, sirviéndole leche en la taza- Pero no te emociones, seguro pusieron cámaras o están espiando desde la puerta-

-Oye, sobre lo de ayer- dijo tímidamente la mayor

-Oh, si, entiendo si prefieres fingir que no pasó-

-¿¡Qué?! Jamás se me ocurriría algo semejante- la cara de asombro de Zoe era un poema -Todo lo que dije era verdad, me gustas y mucho-

-A mi también, así que lo diré de una buena vez- carraspeo, para luego hincarse sobre una pierna -Zoe Trace ¿me harías el enorme placer de dejarme ser tu novia?-

-No se ni para que lo preguntas- y como respuesta la besó, a lo que ambas terminaron en el suelo

-Este es el mejor día de mi vida- exclamó la más alta, mientras ayudaba a la otra a pararse -Lo único que te quería comentar, es que no salí del closet, solo lo hice con mis primos el resto de mi familia o personas no saben nada, a excepción de ti y tus amigas obvio- comentó con miedo a la reacción de la otra

-Eso no me importa, mientras tu sepas quien eres y lo que quieres el resto son nimiedades- una sonrisa enorme se plantó en la cara de ambas y luego se besaron otra vez

-No se como haré para no besarte todo el tiempo-

-Simple, te besaré tanto ahora que al final te terminarás hartando de mis besos- respondió Zoe volviendo a besarla

-No creo que eso sea posible- y siguieron besándose hasta que tuvieron que frenarse porque se les iba a enfriar el café

-¿Alguna vez te han dicho que tus labios saben a miel?- pregunto Inés con aire cómico

-No, ¿y a ti alguna vez te han dicho que saben a cereza?- La otra negó divertida

-Jamás, pero al menos ahora puedes cantar I kissed a girl en toda regla-