❛❛Descendants Of Mafia❜❜ - Taekook

EPILOGUE

Volvían a casa de vuelta en el coche deportivo que recién acababa de comprarse Taehyung. Los días se habían convertido en semanas, meses, hasta años, dos años. El grupo se había esparcido por distintas partes del mundo...

Era algo triste y a la vez algo feliz, porque todos reharían sus vidas y tendrán tiempo para ellos mismos.

Estuvieron en silencio todo el camino, pero eso sí: se dieron miradas, abrazos, caricias...

Todo era demasiado diferente. Habían de admitir que se sentían solos. Era algo nostálgico. Si fuera ellos, me darían ganas de llorar, porque sería una sensación muy contundente a la que no me acostumbraría y de la nada empezaría a recordar todos los buenos momentos. Mi cabeza me traicionaría.

Se querían. Por eso no había necesidad de que se hablen para expresarlo. Tal vez ni siquiera requieran de las caricias o besos para hacerlo, porque ya se conocen de pies a cabeza.

Ingresando a la casa, decidieron quedarse despiertos y llamar a la pareja de casados para saber cómo les va.

Pensaron en llamar a Yoongi y Jimin también, pero ya es muy tarde ahí. Es de noche en donde están. Por otro lado, en Europa, debería estar amaneciendo, ¿no?

El mayor llamó y colgó infinitas veces, pero siempre fue llevado a buzón. Se regalaron miradas de confusión y preocupación. Volvieron a intentar llamarles esta vez con la esperanza de que cojan.

De vuelta al buzón.

Sus miradas nerviosas volvieron a encontrarse nuevamente solo que más confusas que antes.

Jungkook se relamió los labios antes de coger el móvil gentilmente de sus manos, posar su mano sobre la de su novio y empezar a hablar dejando un mensaje.

—Chicos... No tengo ni idea de por qué no cogéis al teléfono. ¿Todo bien? Aunque también puede que os estéis duchando, o aún durmiendo, o ayudando al pequeño Hoseok. Cuando tengáis tiempo, llamadnos, esperamos no habernos preocupado por nada. —finalizó.

Dejó el móvil en la mesa y gateó hasta Taehyung el cuál estaba preocupado, pero demasiado.

—Tae... Tenemos que calmar-

—No puedo calmarme, Jungkook... Entiende que siento que algo va mal, ¿y si algo va mal? Detesto esta sensación con todo mi ser. ¿Y sabes lo peor? Que siempre acierta.

—No me digas eso... Las cosas siempre pueden cambiar rápidamente, y lo sabes. ¿Recuerdas cómo nos llevábamos tú y yo antes? Ahora, míranos.

—Jungkook-

—No te molestes en decir que son casos muy distintos, y lo sé. Sólo intento demostrarte que lo inesperado es lo más esperado. —sujetó el rostro de Taehyung y besó sus labios.

Taehyung, sentado en la silla y abrazado a sus rodillas, correspondió al beso con calma, pero su mente no estaba tranquila. No podía centrarse correctamente.

Separó el beso y lo abrazó de inmediato mientras palmeaba su espalda. Taehyung se negaba a permitir que el menor le tumbe la cabeza en el pecho.

—No quieras hacerte el duro conmigo. Sé muy bien cómo eres...

Alzó la cabeza y vió como Jungkook lo miraba asintiendo con la cabeza, como si dijera "no te voy a juzgar por llorar."

Y entonces lo hizo. Lloró como nunca antes mientras no quería soltarlo y enteraba la cabeza en su pecho.

Le plantaba besitos en la frente mientras acariciaba suavemente su espalda, tal y como se lo hacía él cuando era el que lloraba. Seguía siendo el que lloraba, pero no en ese momento.

—No debes callar tu llanto... Te hace mal, oprimes tus sentimientos, por eso yo nunca lo callo. ¿Sabes lo malo que es para tu cuerpo no dejarlo salir?

—Tengo miedo...

—Lo sé... Por eso te estoy consolando. Taehyung, habla conmigo. Me tienes a tu lado.

—E-es que... —se tapó el rostro. No le agradaba enseñarse llorando, porque se mostraba débil y vulnerable a todos aquellos que querían dañarlo.

—Lo sé... No te alteres. Antes no tenías permiso de expresarte...

—S-si lo hacíamos, é-él nos pegaba y nos encerraba todo el día...

—Lo sé...

—Jungkook. Tócame. Protégeme de ésta toxicidad...

Todo se sintió tan... ¿Nuevo? ¿En qué momento Jungkook se encargaba de eso...? No supo cómo reaccionar, así que sólo parpadeó nervioso.

—T-Taehyung-

—No es lo que piensas, cariño. Solamente quiero que me hagas el amor, nada de intercambiar roles. —presionó su cuello para poder unir sus labios con los suyos.

Lentamente, Taehyung se tumbaba en el sofá y Jungkook encima y nuevamente unían sus labios y los rozaban consecutivamente con deseo.

El menor quería hacerlo olvidarse de todo lo que acababa de pasar. Tal ves lo estaban exagerando todo, pero Taehyung no se imaginaba una vida sin su hermano mayor, Namjoon y Hoseok. Eran su familia, lo que le quedaba junto con Jungkook además de Jimin y Yoongi...

Se desnudaron y Jungkook fue el que besó el cuello de Taehyung. No era la primera vez que lo hacía, pero tampoco era muy frecuente.

El contrario cerraba los ojos mientras soltaba jadeos leves y sujetaba su cintura, apegándolo a él.

Bajó sus besos hasta su pene y deslizó lentamente la lengua, notando como al instante el mayor jadeaba y gruñía. Optó por llevárselo a la boca de una vez por todas y comenzar un vaivén rápido.

—Aah...~ —acarició el cabello de Jungkook. Cada vez que lo masajeaba así le encantaba, se sentía reconfortante.

No tardó en venirse en su boca y hacer que se trague todo sin dejar restos. Le quedó un poco en los labios y se los reclamió dirigiéndose al rostro de Taehyung.

Seguidamente los besó mientras suavemente se metía su pene en él, haciéndose gemir.

—Mmm...~ —gruñó Taehyung. —Apriétalo más...~ —se sentó en el sofá y Jungkook volvió a colocarse encima.

—Aah...~ —su novio le agarraba las nalgas mientras el sólo movía su culo y le succionaba plácidamente su pene.

Lo apretaban en exceso, pero era algo inevitable.

—Ooh...~ T-Tae- Aah~ ¡Aah! ¡AAH!

Tiró al menor al sofá y lo puso en cuatro. Le metió dedos.

—¡Aah! ¡Taehyung!~ ¡BASTA!

—Te excita que te toque aquí, te encanta que te castigue...~

—A-ah...~ —escondió la cabeza entre sus brazos. —M-me vengo. —Taehyung lo giró para que se miren cara a cara.

—Pues te lo prohíbo... —dijo alineando su miembro en su interior. Parecía que por fin se había distraído de todo lo que lo rodeaba.

—¡Aah!~