Para darte sentido

3° La Fiesta

Escuche un timbre o  tal vez la alarma de mi teléfono . Me vi las manos con los ojos entre cerrados estában llenas de pintura seca.
Se volvió a escuchar ese sonido, creo que provenía  de mi teléfono. Ya se me había hecho tarde.
- mierda dormí demasiado - dije al aire
Tenia 5 llamadas perdidas de Verá y una del odioso ¿ porque tiene mi celular?.
No le preste mucha atención a eso y me metí a bañar lo más rápido que pude porque todavía tenía residuos te pintura en las manos y en las uñas.  Había Quedado con Verá en arreglarnos aquí y en decorar el piso con cosas que tuvieran  brillos, además teníamos que ir por algunas bebidas y botanas para la fiesta.
Salí del baño en toalla, todavía empapada del cabello y escuché el elevador abrirse.

- Hola desastre - Dijo Marco a mis espaldas.
Cuando voltie vi a Verá con las manos llenas de adornos plateados y sólo se dedico a darme una sonrisa y su tarado primo solo me estaba escaneando de arriba ha abajo.

-Me iré a poner algo encima para poder ayudarlos a decorar - dije algo apurada mientras corría hacia mi habitación.
Entre rápidamente y me puse una sudadera y unos shorts. Salí de la habitación y verá estaba inflando globos y su primo estaba tratando de colgar las cortinas tornasol , tengo que admitir que se ve bien sufriendo.

-Quieres ayuda y una escalera? - le pregunté mientras estaba recargada en la pared.

El solo sonrió con esa sonrisa tan tonta que tiene y asintió con la cabeza. Le indique donde estaba la escalera para que fuera por esta y cuando la trajo decidí subirme en ella para pegar las cortinas mientras el me las pasaba, solo que las puso en un rincón algo angosto y creo que ya sabía a dónde llevaba esto.

-No se te ocurra hacer un rincón para hacer tus cosas. - dije con mala cara mientras bajaba de la escalera.

-Tan mal crees que estoy? - Pregunto algo sorprendido.

Yo solo alcé los hombros y fui con Verá para preguntale si ya iríamos a comprar las cosas que hacen falta, pero estaba tan concentrada inflando los globos y poniendo luces tornasol que solo se dedico a verme de lado.

-Puedes ir con mi primo sophie, es que me falta terminar de poner algunas cosas.

-Esta bien verá - dije mientras le reventaba un globo que tenía en la mano.
Se asustó tanto que casi se cae de la silla en donde estaba sentada. Se enojo tanto que hizo lo que nunca, me sacó el dedo corazón.

-Vamos desastre - dijo su primo con las llaves en mano mientras se dirigia al elevador.
Yo solo lo seguí .
Mientras estábamos adentro de él gran espacio metalizado me atreví a preguntarle algo.

-Porque regresaste después de tanto tiempo, tienes algo pendiente o porque cambiarías París por regresar aquí?

Se tardó un tiempo en responder.

- por qué extrañaba todo y por otras circunstancias que no te incumben y no son importantes. - respondió con su tono de sarcasmo que lo caracteriza.

-Tienes toda la razón, no me incumbe y tampoco me interesa. - Dije molesta

Se abrieron las puertas del elevador y salí rápidamente antes de que pudiera decirme otra cosa.

-Señorita Méndez, hoy tendrá una fiesta de casualidad? - Preguntó Tomi como si lo estuviera cuestionando pero con una cara de chiste en su rostro.

-Hola Tom, dijo Marco antes de que pudiera responder algo.

Yo solo lo mire con cara de molestia e hice una seña con mis manos para que cerrará la boca.

-Así es Tomi, no habrá ningún problema cierto? Pregunté nerviosa.