13 ° Un Respiro.

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Después de enterarme el por que el doctor se comportaba de esa manera , fui al hospital era obvio que estaría ahí, en el único lugar que lo hacía sentir cómodo.
Al entrar vi a su reseccionista que de igual manera como hace un rato me hizo un gesto de pocos amigos.

-Esta Andrew? - pregunte algo ansiosa.

- Aunque lo estuviera no puedo dejarte pasar - dijo con un tono nada amigable

No le hice caso y fui hacia la puerta del consultorio, no antes de decirle algo

- No creo que este bien que por celos no lo dejes hacer su trabajo - comente mientras estaba girando la perilla
Ella solo me vio con un expresión de impresión pero no me dijo nada y volvió a hacer lo que estaba haciendo antes de que yo apareciera.
Una vez adentro lo vi sentado tras su escritorio, dando la espalda a la puerta .

-Victoria dije que no quería atender a nadie y que tampoco me pasaras recados. - Dijo mirando a la pared que debería tener a sus espaldas

- No soy Victoria - exprese apenada.
Al momento en que escucho mi voz giro su silla y me observó.

- Qué está haciendo aquí señorita Méndez?, si le preocupa el cambio de doctor ya lo estoy viendo - comento mientras hojeaba unos papeles que agarro al momento .

- No vine para eso Andrew, de hecho puedes olvidarlo porque yo quiero que tu sigas al frente de mi tratamiento.

- A que viniste sophie? - Dijo viéndome a los ojos.

-Vine a disculparme, no tenía ni idea de que tu también sabes como se siente. - dije mientras se me salía una lágrima.

- A que te refieres?

Entonces le empecé a explicar lo que la abuela me había dicho y que era una idiota y que lo sentía.
El se quedo callado por un momento y me observó algo extrañado, al no notar respuesta preferí salir pero antes tenía que dejar las cosas claras.

- Si ya no quieres atenderme lo entiendo pero era necesario disculparme y más por haber actuado como una maldita egoísta.
Pero antes de poder abrir la puerta el me sostuvo de la muñeca. Estaba tan ocupada pensando en lo que había hecho que ni siquiera me percate en que momento se paro de su silla.

- No te vayas sophie, no eres una maldita egoísta y no es tu culpa nada de esto, no tenías ni idea de nada.

- Pero ni siquiera me moleste en escucharte.

- Pero creo que podemos empezar de nuevo, no crees? - Pregunto mientras me ofrecía asiento.
Entonces me senté y el hizo lo mismo pero esta vez no tomo asiento detrás del escritorio, si no alado mio.

-Puedo preguntarte algo?- Cuestione.

- Claro, lo que sea. - respondió seguro.

- Como pasó?
El tenso un poco el cuello y se trono los dedos pero no tardó mucho en decirme.

-Un coche los impacto, al igual que con tu madre el conductor estaba en estado de ebriedad.

Yo me quede en silencio por un momento, era increíble que cuando pensabas que nada te ponía unir a una persona, lo hiciera una circunstancia parecida, una enfermedad y hasta tu abuela .

- Por eso conoces a la doctora Hernández? - pregunte curiosa.

- Si, bueno al principio quien me atendió fue su madre pero cuando ella se retiro, di seguimiento con ella.

- Me imagino que fue muy difícil para ti y más siendo un niño.

- El problema no fue perderlos a una edad joven si no que me sentía culpable. - dijo mientras se le oscurecía la mirada.

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