Para darte sentido

15 ° Desastre.

MARCO.

A la mañana siguiente desperté con una llamada un tanto extraña porque el nunca me marcaba amenos que quisiera algo.

- Diga? - dije contestando la llamada

- como estas campeón, como va todo? - Pregunto al otro lado de la línea.

- Por que me marcas, paso algo? - Pregunte con duda.

- Pensé que...

- Pensaste que una llamada iba a compensar todas las otras veces que no lo has hecho?- dije interrumpiendolo.

Se tardó un buen rato en responder.

-Lo siento hijo se que todo esto no está siendo fácil pero te necesito fuerte -

- Como me puedes pedir algo así sin que me sienta culpable por lo que paso papá?

- No es culpa tuya campeón , te tengo que colgar .

Cuando colgó me volví a echar entre las sábanas, estaba preocupado claramente pero por otra parte no deja de pensar en lo que paso anoche en la cocina con sophie. De repente se escucho que alguien tocaba la puerta y fui a abrir.

-Sophie-Dije sorprendido.
No podía creer que ella estuviera aquí después de lo que paso y menos porque se fue sin decirme nada.

- Puedo pasar? - comento casi en forma de susurro.

- Claro - dije invitándola a pasar.
Ella solo observaba todo mi cuarto detenidamente y note que estaba viendo unos boxers que estában en el piso.

-Que te trae por aquí? - pregunte mientras los recogía.

-Vine a regresarte tu chaqueta - Dijo extendiendomela.

- La chaqueta claro, gracias - exprese con algo de decepción - Sophie creo que podríamos hablar de lo que paso.

- No creo que sea buena idea , es mejor olvidarlo - dijo antes de poder poner su mano en la perilla de la puerta

- Pero no puedes pretender que solo no pasó.

- Si puedo y es mejor que no lo menciones - dijo abriendo la puerta,- Verá no lo sabe y quiero que siga así - comento antes de irse.

Después de que se fuera me quede pensando un momento en lo que dijo mi tía y en lo que acababa de pasar, tal vez era lo mejor no intentar nada y olvidar porque ahora nuestras vidas son un desastre. Al tener mi chaqueta en la cama me llego un olor dulce que se metía entre las comisuras de mi nariz, era el perfume de sophie que dejo impregnado en ella con su olor, entonces mientras me la ponía en la nariz no pude evitar pensar una infinidad de posibilidades y si funciona y si es lo que ambos necesitamos, pero preferí tomar una ducha de agua fría y dejar de fantasear un rato.

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Sophie.

Después de llevarle su chaqueta a su perfecta habitación porque como dicen todo se parece a su dueño y esto no era la excepción, se nota que la remodelo a su gusto, ese lindo tono de azul grisáceo en las paredes, sus sábanas perfectamente blancas y su ropa acomodada y planchada por color a excepción de esos boxers en el piso y claro no podía faltar un par de pesas y su barra de acero pegada a la pared para tener ese ego marcado aunque había algo que no entendía si solo se iba quedar una temporada porque se molesto tanto en cambiar todo la habitación pero eso era lo de menos no pude dormir en toda la noche pensando en lo que había pasado en la cocina, todavía podía sentir sus labios en los míos.

Cuando termine de darle la chaqueta baje a la cocina donde Verá estaba haciendo un especie de batido que tenia un color turbio y extraño , solo me senté en una silla mientras seguía con mi pensamiento en lo que paso en este mismo sitio.