Capítulo 17

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Cuando llegamos Boris termino instalando a mi hermano en una de las habitaciones principales y Dimitri se encontraba emocionado viendo lo grande que era su cuarto.

— Esto es un lujo — me aseguro mientras se lanzaba en la cama —. Hasta la cama es cómoda, es como si durmiera sobre plumas.

— Me alegro de que te gustara — le dije acercándome a la cama.

— A mí me alegra que el Beta haya cambiado — me aseguro feliz.

— Sí, lo ha hecho — le dije con emoción.

— Eso veo — me dijo poniéndose de pie.

— Vamos a comer — le dije mientras me acercaba a la puerta.

Terminamos por salir hacia el comedor, mientras Dimitri seguía viendo y tocando todo, pues le parecía muy interesante la decoración. Cuando llegamos el abuelo se encontraba en el comedor, así que le presente a mi hermano, quien quedo encantado de conocerlo.

— Tu mamá también es encantadora. Por eso mi muchacha es tan bonita. Tiene una familia muy linda.

— Así es Beta Boriso. Si hubiera conocido a mi papá le hubiera caído bien — le aseguro mi hermano.

— Supongo que fue un lobo honorable.

— Lo fue — le aseguré recordando a mi papá.

Los padres de Boris y Anastasia terminaron por llegar y sentarse en la mesa. Les presenté a mi hermano y ellos asintieron sentándose y Anastasia termino por sonreírle a mi hermano y él le devolvió la sonrisa. Así que termine por pegarle con el pie y él me volteo a mirar y yo le negué con la cabeza.

Esperamos a Boris para que nos empezaran a pasar el palto de pollo a la naranja. No me gustaba mucho ese menú, pero la señora Agata había cuadrado los menús del siguiente mes. Así que los termine aceptando para evitar problemas.

— Buenas noches — saludo Boris sentándose en la cabecera de la mesa y dejando un suave beso en mis labios —. Hola Rizos.

— Hola — le dije con una sonrisa.

— ¿Cómo te fue hoy? — me preguntó mientras tomaba mi mano.

— Bien — le aseguré con una sonrisa.

— ¿Le gusto la habitación? — le preguntó Boris a mi hermano.

— Sí, muchas gracias Beta — le aseguro mi hermano en tono cordial.

— Me puede decir Boris — le respondió él en tono relajado.

— Se guardan los rangos — le aseguro el señor Sergei.

— Dimitri es hermano de Ania, así que somos familias — le aseguro Boris en tono mordaz.

— Por mí no hay problema, puedo seguirlo llamando Beta o cuñado — le aseguro mi hermano en tono divertido y Anastasia le sonrió.

— Me gusta cuñado — le aseguro Boris.

— A mí también — le respondió Dimitri.

Terminaron por servirnos la comida y comimos en silencio, hasta que Anastasia empezó a preguntarle cosas a mi hermano sobre su estudio y él le respondía de forma clara y relajada.

— También me gustaría estudiar en la universidad — aseguro Anastasia.

— ¿En serio, hija? — le preguntó la señora Agata con entusiasmo.

— Si mamá — le dijo ella con una sonrisa.

— Podríamos buscar una universidad, la que tú quieras — le aseguro el señor Sergei.

La traición del betaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora