Capítulo 13

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Boris

El viaje a Magadan me tenía intranquilo y preocupado. Esperaba que la región se encontrara más tranquila y evitara altercados que la terminaran por hundir más. Pero cuando terminamos por llegar las personas se encontraban alertas y nerviosas ante nuestra visita.

El alfa, venía a supervisarlo de manera directa para poder nombrar, al próximo Beta de la región. Para asegurarme de la seguridad de Ania y mi lobezno en la región, la terminé por presentar y mostrar su marca. No iba a cometer el mismo error que el Alfa y que estas personas terminaran por burlarse de ella como tiempo atrás lo hicieron con la luna.

Para tener más tranquilidad, llevaba a Ania conmigo a todos lados, no me confiaba de estos lobos y quería evitar riesgos.

— Te noto intranquilo – me dijo Ania tomando mi mano de forma suave, mientras seguíamos caminando con tranquilidad.

— El territorio sigue estando hostil. — le aseguré mientras le daba una sonrisa a medias.

— Supongo que se sienten nerviosos por la presencia de altos mandos, después de que fueron juzgados como traidores. Pero no he notado nada raro. — me aseguro con una sonrisa.

— Espero que sean cosas mías. —le dije mientras seguíamos avanzando.

Cuando terminamos por llegar a la casa principal, exclamaciones de sorpresa y miedo se escuchaban por todo el lugar. Así que termine por avanzar mientras le indicaba a dos Omegas que custodiaran a Ania.

La escena que me encontré fue aterradora. Kesar se encontraba sometido por dos omegas, mientras de su boca brotaba sangre sin cesar, casi asfixiándolo. El Alfa desprendía molestia y rabia pidiendo una explicación que nadie le daba, pues todos estaban presos del pánico.

— Quiera saber por qué te habla como si ya lo hubiera hecho antes – pronuncio el Alfa con voz dura a la luna. Mientras que ella seguía siendo un manojo de nervios y llantos.

— Damien - le respondió ella con su suave voz.

— Dime —le solicito el Alfa de forma ruda tomando su mentón para que alzara la vista.

La luna seguía llorando, mientras que el Alfa pedía una explicación que ella no le quería dar. Tome una fuerte respiración para tomar el valor que se me escapaba en estos momentos.

— Porque ya había pasado antes – le respondí, por lo que el Alfa se vino contra mí.

— ¿Qué mierdas está diciendo? – me rugió el Alfa con rabia encarándome con verdadero odio - ¿cuándo fue? – preguntó con su mandíbula tensa.

— La otra vez que estuvimos aquí alfa – le asegure.

— ¿Alguien más tuvo que ver? – me preguntó de forma fría y molesta.

— Yakov también estuvo directamente involucrado y varios integrantes se burlaron mientras paso – le dije mientras su mirada y semblante se ensombrecía más.

Damien solo empezaba a respirar con más pesadez y su furia estaba fuera de control, Black termino por llegar, para esperar las disposiciones del alfa, mientras que los guardias de Leilani se pusieron a sus costados para protegerla.

— Quiero a Yakov en el calabozo y a partir de ahora la manada entera está en la ley de vigilancia y limpieza – le dijo con rotundidad.

El alfa estaba fuera de control y había decretado orden y limpieza total en la mandada, por lo que los Omegas de confianza del Alfa empezaron acorralar a los lobos del comedor en un solo punto, mientras que los otros hombres salían para empezar acorralar a las personas de la manada.

La traición del betaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora