Capítulo XIII: ¿Aun quieres esto?
Jagger
—¿Te quedarás conmigo esta noche? —susurro contra la boca de Dakota que no se detiene de darme besos continuos, no es que tenga una queja al respecto.
—No puedo, tengo que adelantar parte del trabajo final del seminario, ya sabes, en donde estoy con Chad —susurra contra mi barbilla, jugando con sus dedos en mi cabello.
Está sobre mí a horcajadas, en el jardín de la facultad de derecho, en donde hemos desayunado y pasado un rato juntos antes de que ella tenga que ir a su próxima clase, la mía fue suspendida.
—Puedo ayudarte —Me ofrezco.
—Parece que te gusta demasiado ser mi tutor —Sonríe y presiono mi mano del centro de su espalda para pegarla a mi torso antes de meter un mechón de cabello detrás de su oreja.
—Me gustan todas las posibilidades que hay luego de darte tutorías y eso hace que tengas más tiempo libre para mí.
—Eres un pegajoso —Se burla y planto un beso en el centro de su garganta que la tiene suspirando.
—¿Me culpas por querer pasar más tiempo contigo? Pocas veces podemos simplemente vivir el momento.
—Eres mi primer novio universitario.
—¿Y qué tal lo estoy haciendo?
—Perfecto —Se inclina dándome un beso—. Además, tengo que admitir que me da satisfacción que muchos sientan envidia, todos quieren estar contigo, pero me quieres a mí.
—Solo a ti —Le garantizo y me besa la sien antes de presionar su barbilla sobre mi cabeza, masajeándome el cuero cabelludo.
—Ojalá pudiésemos estar siempre así.
—Sabes que las relaciones no son siempre felicidad y buenos momentos.
—Sí, pero tampoco es peligro e incertidumbre —suspira—. Sin embargo, eso fue lo que nos acercó ¿No?
—Hum te recuerdo protestando mucho al principio. Eras dura e inaccesible —Sonrío, aunque no puede verme—. "Yo no juego Jagger" "Me gustan las etiquetas" "Nadie creerá que estás saliendo conmigo" "deja de jugar" "esto es por mi hermana" —Hago una mala imitación de su voz y se sacude sobre mí con la risa.
—Solo cuidaba de mi corazón.
—¿Y ahora?
—Prefiero dártelo y que lo rompas, a privarlo de enamorarse de ti.
—Eso es tan romántico —digo y aunque no puedo verla, sé que se sonroja — y para que lo sepas, no te romperé el corazón.
No decimos más durante largos segundos, ambos somos conscientes de que ya debería ir a clases o llegará tarde.
—Me gustas con el cabello así de largo, no creí que fuese posible que te vieras aún más guapo.
Se aleja lo suficiente para que una vez más podamos vernos y m retira mechones que ya me cubren las cejas y casi los parpados.
—Me gusta pasar mis dedos por el.
—Y también tirar de él cuando follamos —agrego y sonríe—, pero debo cortarlo un poco antes de que se meta en mis ojos.
—Déjame hacerlo, así evitaré que quites demasiado.
—¿Ahora eres mi estilista?
—Soy una novia precavida.
ESTÁS LEYENDO
Negociaciones (#2 El Negocio)
RomanceYa supiste en Contradicciones quién es Dakota Monroe. La pregunta crucial ahora es: ¿Quién es Jagger Castleraigh? Él no es completamente un chico malo, tampoco es el bueno. No es un santo y todavía no lo llaman Lucifer. Él no es el príncipe, tampo...