Mi vida...¿contigo? (PAUSADA HASTA NUEVO AVISO)

2

Llego junto con Raquel al lugar y nos sentamos en una mesa para 8 personas, aunque somos siete, pero no hay ninguna que tenga las sillas exactas, se acerca un chico y nos dice que que vamos a ordenar, simplemente le decimos que aun no y se va.

Al verme Cris me abraza, y lo mismo hace Yare que venia justo detrás de ella.

-oh chicas, cuanto me alegró de volver a verlas-justo cuando digo eso llega una chica muy delgada y me saluda, no se quien sea así que me atrevo a preguntarle quien es.

-¿acaso te olvidaste de mi?-al decir eso inmediatamente se que esa chica que para mi ahora era una desconocida es Pao, la prima de Raquel. En ese momento llega Dany.
Todas están muy cambiadas pero ella más. Yatzy para variar llega 5 minutos mas tarde y hasta ese momento pedimos nuestros helados.

-me alegro tanto de estar de nuevo con ustedes- digo con lágrimas en los ojos-No saben cuanto tiempo he pasado pensando en ustedes.

-y nosotras a ti Leah, pero explicame ¿por qué nunca nos hablaste o mandaste un mensaje?-dice Yatzy

-mis papás me quitaron todo contacto con el exterior

Así pasamos horas y horas hablando de como ha sido su vida en estos años, lo que han hecho, la Raquel ya es chef, Yareli esta a punto de terminar su carrera de cultura de belleza, Dany el próximo año se titula, Paola ya esta trabajando y en este momento debería de estar en su trabajo pero se salió antes, Yatzy esta en planes de graduación y Cris esta buscando trabajo.
Yo en cambio no les puedo contar nada interesante, en el internado no podía hacer nada, solo les digo que ya tengo mi carrera de fisioterapeuta y que espero poder encontrar un buen empleo.

A las 9 aproximadamente nos empezamos a despedir ya que no se que tan flexibles sean mis permisos ahora. Mi vida esta cambiando, espero que sea para bien, sólo debo dejar de pensar en Patrick cada que camino por cualquier lado imaginandome que me lo voy a encontrar.

Me voy con Raquel, Cris y Pao y al cabo de 20 minutos ya estoy tocando en timbre de mi casa, ya que ni llaves tengo.

Cuando llegó mis papás me empiezan a decir que no voy a volver a como estaba antes, que debí de tener en cuenta lo preocupados que estarían al ver que su hija estaba desaparecida por horas. Simplemente me limito a asentir y me subo al que antes era mi recámara destiendo mi cama y que duermo sin siquiera quitarme la ropa o los zapatos.

Al día siguiente me levantó a las 10 de la mañana cuando escucho que mi mamá le esta gritando a alguien que se vaya de aquí. Decido bajar a ayudarle y para mi gran sorpresa es nada más y nada menos que Teresa, al verme se queda sorprendida y yo estoy igual, al principio siento unas ganas inmensas de bajar corriendo las escaleras y abrazar a esa chica que alguna vez fue mi amiga, luego recuerdo que por ella estuve alejada de mis verdaderas amigas durante años y bajo tranquilamente, sin mostrar ningún sentimiento hacia ella.