Los hijos de la comunidad (Vhaarakook)

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KIM TAEHYUNG

Empeze a vigilar a Hoseok, todo normal la verda, todos los días se levantaba a caminar antes de ir a trabajar, trabajaba de 8:30 a 5 de la tarde en un supermercado, los viernes, sábados y domingos iba a una iglesia y lloraba como María Magdalena cubriendo su cabeza con un velo, lo que me parecía ridiculo, en mi experiencia estás eran las mujeres que más pecados comitian y era las mejores en la cama tengo que reconocer, obvio tanto tiempo reprimiendo sus deseos, me pregunto que tanto reprimes tu Hoseok.

- Para que oras tanto?- me reí cuando levantó el rostro como si Dios le hubiera hablado... bueno... yo le hable es casi igual.

- Qué haces aquí? - Levante mi mano a su velo y se lo saque el trato de detenerme pero me levante saliendo de ese estupido lugar.

- A donde vas? - Seguí mi camino hasta mi camioneta y subirme en ella, Hoseok venia detrás y me siguió a mi ventana tocándola con fuerza.

- Taehyung dame mi velo que te sucede? Porque no respetas la casa de Dios! - Me reí la casa de Dios ha!

Baje la ventana y me reí en su cara- La casa de Dios! ? Es una broma no? - abrí la puerta sin bajarme del carro solo sentándome frente a el y acercándolo en medio de mis piernas.- En esa casa se podía sentir más demonios que en el burdel donde torturo a mis enemigos Hoseok.

- En la casa de Dios hay de todo, lo importante es construir una relación con Dios, nuestro creador.

Me acerque a sus labios acariciando su cabello.

- Relacion? Dios? A ver dime Hobi  .... Donde esta tu Dios ahora? Tu Dios te protege Hoseok? Si yo quisiera subirte a mi camioneta y violarte crees que tu Dios te salvaría ? - unos pasos se escucharon y una voz femenina respondió.

- Si lo hará , porque sus hijos estamos aquí. Ahora váyase joven antes que llamemos a la policía - Una anciana se acerca y toma la mano de Hoseok , voltee a ver a sus ojos, lagrimas , muchas lagrimas saladas que eran para mi, Debo alejarme de este doncel  que esta despertando todo lo que enterré con lev.

Sus ojos estaban como cascadas, estaba herido, lo había echo sentir mal y aún así lo excitaba, aún así el me quería a mi.

Cerre la puerta de mi carro arrancando y saliendo de ese lugar no sin antes voltear a ver a sus ojos y ese puto deseo me tenia al borde de un abismó del cual me aleje hace años.

Oh Jung Hoseok , te fascina ser la victima , sentirte perseguido, que yo te aceche y a mi me fascina ser un cazador.

Mi sonrisa no desapareció por la gran hora que maneje hasta llegar a casa, solo recordar a ese doncel  que hacía que mi ereccion creciera imaginando amarrarlo y joderlo como yo quisiera, sin cuidado, con rabia, ver su piel marcada por mis manos, hacerlo gritar de dolor, hacerlo gritar mi nombre y que nunca se atreviera a pronunciar el de nadie más.

Lo iba hacer iba amarrarlo y hacerlo mío.... Pero que mierda estoy diciendo?

Hoseok acaba de perder a su bebé y yo estoy apunto de ser papá, lev es la mujer de mi vida y yo acosando a un pobre doncel roto por la vida, es obvio que busque refugiarse en su Dios, el ser humano está echo para creer y preferimos creer en alguien superior.

Entonces si necesitabas refugio porque no vienes a mi Hoseok, yo puedo proveerte la protección que necesitas, verdad, lev no se molestaría verdad? Entendería, Hoseok necesita mi protección, si hablo con ella, lev siempre sería la primera para mi, Hoseok  viviría en el basement, no le permitiría acercarse a lev, lev obviamente llevaría mi anillo y mi apellido ella sería mi mujer, mi esposa y Hoseok sería mi propiedad.

Podría hacerlo... aunque le mintiera a lev, pero ella me entendería como lo ha echo todos estos años, Hoseok solo sería para no lastimarla a ella.

Sonríe ante el pensamiento, Hoseok en mi colchón , sus vestidos rotos, esos ojos rotos. Y mi cuerpo enterrado en el, lo necesito, esta presión en mi pecho no me deja seguir si el no está. Lev es mi paz, es el agua que apaga el infierno dentro mío.