Los qué vieron la película y/o la serie, los que hayan leído los libros o han hecho ambas cosas recordarán que hay escenas donde Rose y Dimitri están juntos a ratos.
Volviendo a las escenas del amuleto de amor y cuando Rose Hathaway recibe su monij...
Había pasado un tiempo corto desde el baile de equinoccio, el banquete de la reina Tatiana en la academia San Vladimir y la primera marca monija en el cuello de Rose por haber matado a sus primeros strigois. Todo estaba normal para la mayoría de las personas, excepto por una joven novicia de 17 años y un joven guardián ruso de 24 años.
Por un lado, Dimitri Belikov se había encerrado en su trabajo como guardián de la princesa Dragomir y mentor de Rose Hathaway luego de confesarle a esa joven novicia que sentía algo por ella. Por otro lado, la joven de largo cabello oscuro estaba molesta por la actitud del ruso y evitaba quedarse a solas con éste fuera de su entrenamiento o alguna emergencia que involucrará a Lissa.
Fuera de eso, la hija de la guardiana Hathaway era muy constante con su entrenamiento, sus notas estaban mejorando y de vez en cuando se colaba en alguna fiesta juvenil para distraerse. Ese día no fue la excepción con su responsabilidad.
Eran las 5:00 de la mañana humana cuando la joven novicia se despertó. Se levantó temprano mientras Lissa Dragomir dormía, se puso un top deportivo, guardó su botella de agua, su uniforme y toallas limpias en un bolso deportivo y salió del dormitorio para trotar un rato antes de tener que ver a Dimitri para entrenar. Se hizo una coleta, tomó su teléfono y audífonos, los conectó, seleccionó una canción y se los puso en los oídos para no oír a Dimitri si le hablaba.
Luego de ponerse los audífonos, comenzó a trotar por toda la cancha donde los novicios tenían sus clases durante la noche humana sin notar que cierto guardián había aparecido y la observaba con una sonrisa en la cara mientras ella calentaba.
Dimitri llego en silencio usando ropa deportiva y cargando al igual que Rose un bolso donde tenia entre otras cosas su uniforme de trabajo. Sin hacer ruido, el recién llegado se acercó a la joven, posicionándose a su lado e imitando su gesto sonriendo.
Buenos días, Rose- dijo serio Dimitri.
La mencionada lo ignoró y siguió trotando sin decir nada.<< Fue una buena elección trotar con los audífonos puestos para no oír a Dimitri>> se dijo mentalmente sonriendo al ver cómo cierto ruso la miraba molesto por ser ignorado.
Perdón, ¿dijiste algo?- le pregunto sonriendo a Dimitri y él se dio cuenta de que la joven estaba usando audífonos mientras trotaba.
¿En serio vas a ignorarme así hasta el entrenamiento?- le quitó un audífono y preguntó serio el ruso.
Ese es mi problema, camarada- dijo Rose seria y continuó trotando.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Rose...- dijo serio el ruso mientras la seguía trotando.- Odio cuando me ignoras así- dijo más para sí mismo.
Pero Rose lo había escuchado y lo quedó mirando seria un momento antes de retomar el trote.
Puedo trotar sola, no es necesario que trotes conmigo- dijo la novicia seria. << Tú te lo buscaste, camarada. No debiste evitarme luego de admitir que te gusto.>> Con ese pensamiento rondando su terca cabeza, la joven continuó trotando mientras evitaba a su acompañante.
Y aún así quiero trotar contigo- dijo sonriendo el ruso ignorando el fuerte carácter de la chica.
Rose dejó de trotar y se alejó rápidamente del ruso para entrar en el gimnasio y esperar a que llegara para comenzar a entrenar.
Deja de ignorarme así, Rosa.- dijo Dimitri viendo a la joven entrando en el gimnasio.- Lo hago por tu bien.
Dimitri apresuró el paso para alcanzar a la enojada novicia en el interior del gimnasio y cuando entró, la encontró haciendo pesas.
Quiero que me escuches, por favor- dijo serio el ruso.
No quiero y no puedes obligarme- le contestó la británica molesta.
Eres demasiado terca e impulsiva.- dijo Dimitri serio observándola mientras ella levantaba pesas.- Además de insubordinada, fuerte, poderosa y valiente.
Di lo que quieras- dijo molesta Rose.
El ruso amarro su cabello en una colita antes de comenzar a entrenar, dejando expuestas sus marcas por haber matado a varios strigois para proteger a los morois. No por nada la mayoría de los guardianes y novicios lo consideraban un dios.
Ambos dhampirs comenzaron a entrenar poniéndose en posición defensiva: espalda derecha, las manos hechas puños, una pierna delante de la otra, los brazos derechos hasta el codo y ambas piernas un poco flectadas.
Dimitri dio el primer paso sin quitar su cara seria, sabía que Rose estaba molesta con él por haberla estado evitando, pero de todas formas quería hablar con ella y el que ella lo ignorara e hiciera creer que todo estaba bien lo molestaba un poco. El entrenamiento era una forma de hablar con la joven sin que se alejara en cuanto tocaran el tema o eso esperaba el ruso.
