Rose y Dimitri(+18)- Un amor de verdad

Cap. 8- ¿Solamente fue descontrol o noche intensa?

Dimitri seguía jadeando al sentir las manos de la novicia acariciando su pene y la escuchaba reír, la joven observaba sonriendo la reacción del joven. En poco menos de un minuto el ruso los había hecho girar y penetrado poco después a su compañera, quien gemía mientras arañaba la espalda del guardián Belikov. 

Dimitri- jadeaba Rose sonriendo. 

Rosa- jadeo Dimitri sonriendo- Mi Rosa. 

Rose había alcanzado a arreglar los tirantes de sus sostén y a ponerse  el top mientras que el joven guardián había alcanzado a acomodar adecuadamente su bóxer y ponerse el pantalón cuando la puerta del dormitorio se abrió, dejando ver a una seria Alberta entrando en ese lugar.  

Alberta Petrov pillo a los dos dhampirs in fraganti cuando Dimitri volvía a besar el cuello de la joven Hathaway y ella jadeaba por el placer que sentía cuando el guardián ruso realizaba ese gesto. 

¿Qué sucede aquí?- pregunto Alberta seria al ver la escena. 

Dimitri palideció al oír la voz de la guardiana Petrov y Rose solo se quedo observando seria a la recién llegada.

Dimitri, ¿me puedes decir que haces con Rose?- pregunto seria Alberta. 

Hace un tiempo que vengo sintiendo esta atracción por Rosa.- respondió tranquila y seriamente Dimitri- Me aleje por un corto tiempo de ella, luego de asegurarme que tuviera la marca monija, esperando que esta atracción fuera un sentimiento pasajero, pero no fue así y hace poco tuvimos un encuentro mientras entrenábamos y conociéndola muy bien, ambos deseábamos esto.   

Esto ¿solamente fue descontrol o fue una noche intensa?-pregunto nuevamente seria Alberta.

Diría que fue una noche intensa, yo amo a Rosa- respondió seriamente Dimitri. 

Yo amo a Dimitri y aceptare cualquier cosa menos alejarme de mis amigos y de él- dijo seria y firmemente Rose. 

Rose se apego aun más al descubierto pecho del guardián ruso mientras Alberta los observaba seriamente. 

Bien, no diré nada al respecto siempre y cuando me prometan dos cosas.- dijo seria finalmente la guardiana Petrov- La primera es que Rose no descuide sus estudios ni responsabilidades y la segunda es que serán discretos, es decir, podrán verse aquí y en la habitación de Rose siempre y cuando no llamen mucho la atención ni hagan mucho ruido. 

Lo prometemos, Alberta.- dijo seriamente y sonriendo Dimitri-Ambos cuidaremos de nuestras responsabilidades. 

Alberta se fue de la habitación y Rose termino de vestirse para regresar a su habitación antes de que los demás guardianes notaran su ausencia en el dormitorio que compartía con Lissa. Se puso la polera con mangas que había dejado detrás de la puerta, se despidió de Dimitri y caminó hasta su dormitorio.