Trying to be someone

I love you more...

-Corre...- le susurré a Ed.

-Qué?- me preguntó confundido.

-Sólo hazlo- le dije y empezamos a correr dentro de un bosque. Mis lágrimas no paraban de salir y Ed me gritaba qué era lo que pasaba.

Estabamos perdidos. En la mitad de un bosque desconocido.

-A ver, Sky. Qué pasa? Por qué lloras? Por qué me obligaste a correr? Sabes que odio verte llorar. Por favor, dime- me dice preocupado, caminando de un lado a otro.

-Él... él... estaba.. Gale.. alto.. pelo negro... asesino..- dije apenas, sin poder modular.

-Explícate- me dice.

-Estaba el asesino, en la vereda de en frente. Alto, pelo negro, ojos verdes, labios carnosos. Yo lo ví. No estoy loca. Lo juro- dije, completamente nerviosa.

-Cómo sabes que es él si...-

-Bueno bueno. Sky, otra vez. Después de este duro año intentando olvidar- dice una voz masculina detrás de nosotros. Allí estaba él. Acostado sobre un árbol, sosteniendo un cuchillo en su mano derecha. Empezó a acercarse y Ed se puso en frente mío.

-Para qué vuelves? Estamos hartos, sabes?- le dijo Ed. Una sonrisa salió de su pálido rostro, mientras se seguía acercando hacia nosotros, quedando en frente de Ed.

-Vengo a terminar lo que empecé- dijo. Yo tiré del buzo de Ed. Él entendio y comenzamos a correr. Se escuchaban los fuertes y rápidos pasos de Gale. Nosotros corriamos sin rumbo alguno hasta terminar en donde podía verse una parte de la ciudad, cerca del hospital en donde estaba John. Seguimos hasta que escucho un grito de dolor.

-Ed...- pensé.

Giré mi cabeza y Ed tenía un corte en su mejilla derecha que ocupaba casi la mitad de su cara. Gale ya no estaba allí. Frené y saqué de mi mochila un pañuelo e intente frenar la sangre.

-Otra vez no, Chase- dije en un susurro- Vamos, Ed. Hay que llevarte al hospital- dije y empezamos a correr nuevamente.

Llegamos y la chica de recepción se asustó al ver semejante tajo en Ed. En ese instante, Ed se tambalea, y cae en mis brazos. Yo empezé a gritar y a llorar. Los enfermeros se lo llevaron enseguida en una camilla mientras gritaban cosas como PACIENTE CON PÉRDIDA DE SANGRE o RÁPIDO, A LA SALA 14. Lo único que hice fue correr detrás de ellos, mientras las lágrimas salían con fuerza, hasta que llegué en donde era la habitación de John. Todos se asustaron al ver a Ed con semejante lastimadura en su perfecto rostro. Seguí corriendo detrás de ellos hasta que entraron en la dicha sala 14. Yo caí de rodillas y tape mi cara con mis manos, empezando a sollozar fuertemente. Sentí como alguien apoya su mano en mi espalda. Me di vuelta y Thom, estaba allí acariciando mi columna suavemente y todo el resto de la banda detrás, mirandome con tristeza y comprensión. Yo me levanté y me abrazó, haciendome llorar aún más fuerte. Sentí como todos se fueron integrando en el abrazo, haciendome sentir mas segura. En ese momento me di cuenta que no estaba sola. Nos separamos de a poco y todos me miraron.

-Perdón por todo, Sky. Te necesitamos de vuelta en la banda. Nada fue lo mismo desde que te fuiste.- me dice Lauren.

-Me encantaría, pero creo que no es un buen momento para hablar de eso- dije y mi voz se quebró. Thom volvió a abrazarme. Luego de unos instantes, nos separamos y nos fuimos a sentar, esperando que alguien salga de esa maldita habitación.

-A ver, Sky. Qué es exactamente lo que pasó?- me pregunta Thom preocupado. Yo suspiré y me digné a hablar.

-Habíamos ido a un Starbucks, ya que moría de hambre, pero no quería ir sola y le pregunté si quería acompañarme. Él aceptó. En ese momento estabamos hablando y vi detrás de él a Gale- dije y todos se quedaron confundidos.

-Quién es Gale?- pregunta Rose.

-...El asesino- dije y todos quedaron anonadados- ya sé, se preguntarán "cómo sabes que es él?". Cuando quedé inconsciente tuve un sueño en donde estaba en un cuarto enorme blanco atada en una silla y ese hombre apareció. Alto, pelo negro, ojos verdes, labios carnosos. Gale Chase. Era el mismo hombre que nos persiguió dentro de un bosque y al parecer alcanzó a Ed...- dije y rompí en llanto. Lily me abrazó, tratando de consolarme.

-Hey, va a estar bien. Tal vez perdió un poco de sangre. No creo que sea nada grave. Además es un chico fuerte. Él va a salir de esta- me susurra al oído y yo asentí. En ese momento un médico salió de aquella sala. Nosotros nos paramos en ese instante.

-Cómo está?- preguntó Freddie.

-Bueno, tuvo una leve pérdida de sangre pero está estable. Aún no despierta. Sigue con los efectos de la anestesia ya que tuvimos que coserle la herida, era bastante profunda. Pueden pasar a verlo pero de a uno. Que tengan muy buenas tardes- dice y se va. Todos me miraron. Sabía lo que significaba. Debía entrar.

Entré y allí estaba él, con una gran cicatriz en su mejilla y suero. Pero nunca perdió su perfección.

Me senté en el sillón que estaba junto a la camilla y tomé su suave mano.

-Eres muy fuerte, Stock. En serio, no se cómo decirte lo que yo siento por ti- dije y pensé un poco.- Te amo tanto, idiota.-Continué. Tenía que desahogarme- Mientras tengas esa cicatriz me voy a sentir culpable de todo. Pero aún eres perfecto. Te amo, Ed.- dije y besé su mejilla no lastimada para dirigirme hacia la puerta.

-Yo te amo más...- dijo en un susurro.