DOCE

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Baekhyun había aprendido muchos trucos de cuando estaba con su mamá, ella decía que podías escapar de los problemas corriendo y luego resultó que no era así.

Resultaba que no podías escapar corriendo de todos lados, de los problemas que tenías que enfrentar junto con la misma realidad en la que vivían, porque era fácil hacerlo cuando tu problema era haber robado algo de comida en la tienda de conveniencia, la mujer que atendía tenía marido y él si era rápido corriendo, pero casi nunca estaba y su esposa estaba embarazada muy seguido, Baekhyun y su madre no estaban seguros ya de cuántos hijos tenían, así que robaban cuando estaba en sus embarazados pero ya muy adelantados, ella primero corría pero luego ya ni siquiera se molestaba y los dejaba salirse con la suya. 

Baekhyun una vez había tenido problemas con uno de sus clientes, se había dado cuenta de que le había robado algo de dinero, Baekhyun solo quería dinero para poder llevar algo a su casa, no le había robado tanto, no es que tuviera mucho dinero en la cartera, a lo mucho había robado 49 dólares y eso era una miseria por el tipo de vida que llevaba, a lo mucho le serviría para comer en la semana, pero resultó que el consejo de su mamá de escapar corriendo de los problemas no aplicó en esos momentos, porque terminó recibiendo una paliza pero al menos había tenido un montón de dinero consigo. 

No fue la primera vez que Baekhyun quiso escapar corriendo de sus problemas, muchos de sus clientes eran idiotas y se creían sus dueños pero no era así, así que siempre tenía que escapar, pero eso se volvía complicado con el tiempo, así que pensó que tenía que aprender a defenderse, ¿cómo era eso? Bueno, primero consiguió una navaja para poder defenderse, incluso si le hacía daño a alguien pensó que no le importaba con tal de sobrevivir el mismo, pero la navaja le daba seguridad, luego consiguió un cuchillo de cocina pero comenzó a sentirse como un asesino o un ladrón (que si era en una pequeña parte) pero si era detenido por la policía, cosa que pasaba muy seguido, seguramente terminaría en un gran problema. 

Aprendió a los golpes, viendo televisión basura y riñas en la calle, incluso tenía un amigo que era un aspirante a boxeador cuando era más joven pero las sustancias le hicieron una mala jugada y terminó en una mala vida como todos los que conocía, él sabía muchos trucos. 

-Siempre es bueno ir directo contra la nariz, aturden a tu oponente y ganas tiempo, en las luchas está mal pero en la calle es ley.- le dijo, mientras tiraba golpes al aire y Baekhyun lo imitaba a medias. -Pero con esos bracitos no le harás daño a nadie, tienes que subir de peso.- 

-Uh, para eso tendría que comprar más comida, pero no dijo hacer algo como eso ¿verdad?- le dijo Baekhyun y ese chico comenzó a reírse. 

-Tienes razón, entonces deberías ser muy rudo, a la nariz, a la entrepierna, siempre es un buen lugar para golpear cuando éstas en una pelea.- Baekhyun había visto a ese tipo pelear en un montón de ocasiones, casi siempre cuando no estaba "en sus 5 sentidos", así que no sabía cuánto creerles él y sus lecciones pero nunca había perdido ni una sola vez, siempre que se metían con él, terminaba peleando, pasaba unos días en la cárcel, se daban cuenta de que era un tipo inofensivo, y que de todos modos no tenía nada de dinero para pagar multas o gastos médicos, lo dejaban ir con una advertencia que iba a ignorar en unos días cuando fuera a un bar y peleará de nuevo y luego Baek iba a buscarlo para irse juntos a buscar algo que comer, era de esas veces que no tenía donde quedarse y tenía un amigo temporal, él fue su amigo temporal, hasta que una de sus peleas, terminó en algo peor y luego, Baekhyun fue a buscarlo a la comisaría y le dijeron que no saldría en un buen tiempo.

Supuso que era todo. 

Baekhyun no quería pelear, quería defenderse de los tipos que eran crueles con él, no porque tuviera ese estilo de vida significaba que tenía que ser maltratado pero era algo que pocos entendían, a veces no querían pagarle, a veces decían cosas hirientes cuando le pagaban, entonces quería darles su merecido, no tenía a nadie más a quien pedirle eso, se tenía a sí mismo y tenía que tener valor. 

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