Lucerys ha sido nombrado heredero de Driftmark pero ahora deberá mantenerse en la capital y soportar el acoso y las humillaciones de Aemond con tal de no arruinar los planes de su familia para tomar el trono de hierro.
Sin embargo, siguiendo los co...
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Hace cinco meses:
—¿Cómo estamos seguros que lo que esa mujer dice es cierto? ¿Que son los verdes los que envenenan a mi padre? ¿O si realmente está siendo envenenado?
Mamá no se escucha contenta mientras tiene una reunión con su consejo.
Daella y yo estamos escondidos intentando averiguar que es lo que pasa, pero no entiendo nada. ¿El rey siendo envenenado? Eso suena terrible.
Incluso Jace y Alyssa están allí sentados, prestando atención e ignorandose el uno al otro.
—No me sorprendería si fuera cierto —dice Daemon—. Los Hightower son una plaga de gusanos, si están envenenando a mi hermano, deberíamos ir y asesinarlos a todos.
»Ellos no saben que lo sabemos, iremos de visita y los asesinaremos en sus propias camas. No tendrán oportunidad de nada e incluso los dragones sobrevivirán.
—Eso traería una guerra, nadie creería que lo que hicimos fue en nombre del rey.
—Princesa debemos actuar, el rey podría estar siendo envenenado —exige un Lord ofuscado.
—Actuaremos con inteligencia. Primero necesitamos saber quién exactamente lo envenena. ¿Otto? ¿Aegon?
—¿Alicent? —ayuda Daemon.
Mamá no le da una mirada agradecida, fue un poco más como de advertencia.
—Nuestra madre es asombrosa —le digo a Daella.
—Lo es —dice Daella sin mirarme—. Toda esa horda de hombres están desesperados por ganar un poco de honor al ir a una guerra y ella es lo único que los detiene. Incluso puede controlar a Daemon.
—Baja la voz, alguien puede escucharnos.
—Bueno pero es la verdad, mamá lo controla mejor que cualquiera.
—Daemon no necesita ser controlado, es un ser humano con decisiones y pensamientos propios —digo viendo cómo Jace y él acomodan la mesa de aliados.
—Eso lo dices porque con nosotros es amable, pero personas como Daemon necesitan ser controladas.
—Basta Daella —intento regañarla— no seas irrespetuosa, ni siquiera deberíamos estar aquí husmeando entre los asuntos privados de mamá.
