XII. Callejon Diagon

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Pov Harry

-Amigos.

Yo solo atine a sonreirle y el me devolvio la sonrisa, llevaba tanto tiempo sin verle una asi en mis visiones, tanto tiempo que el solo verla me hizo sonreir mas, a lo que el se sonrojo, por el Angel, se ve tan bien asi, espero tener la oportunidad de lograr repetir esta ocasion, una y otra vez, ahora entiendo por que papa Magnus es tan feliz cuando logra volver a sonrojar a papa Alec, lastimosamente no tuve el tiempo de intentar ponerlo aun mas rojo, ya que en solo un instante volvio la Madame Malkin a entregarle a Draco su ropa, por el Angel al fin puedo darle nombre a su cara, apenas caigo en eso, es increible.

-Bueno querido, aqui esta tu ropa con los ajustes que ordeno tu madre, esta vez con un hechizo de ajuste de tamaño, puede ahora tengas un menor peso, pero es comun que los chicos sufran un aumento de peso al entrar en Hogwarts si llegaron a adelgazar antes de ingresar, puedes esperar a tus padres en la sala de espera -informo ella entregandole un pequeño paquete que debe de contener sus tunicas, despues se volteo hacia mi -en cuanto a ti guapo, ya agregue tus medidas a los archivo y tus uniformes seran entregados a tu padre cuando venga hablar conmigo sobre tu guardaropa completo de mago, segun tu otro padre el vendre por aqui mañana a cuadrar eso.

-¿Vamos Harry?, quiero buscar un pergamino para anotarte mi direccion y que tu puedas anotar la tuya, para facilitar el correo por lechuza -me dijo Draco parandose a mi lado, todavia con las orejas rojas y con su cabello un poco desordenado, casi como si hubiera pasado sus dedos por el, retirando un poco del gel que lo cubria, se ve mejor sin todo ese gel, algun dia tendre que decirselo.

-Claro, vamos, siempre traigo conmigo un lapiz y mi cuaderno de bocetos, podemos anotar las direcciones alli, te dare una cuantas para que te sea mas facil ubicarme, serian la direccion de loft de mis padres y el instituto ambos en New York, ya que cuando no este en clases o cerca de ellas lo pasare alli, bueno, muy probablemente y la direccion de la casa de mi padrino aqui en Londres, que es donde me quedare el resto de vacaciones -le respondi tomandole de la mano para jalarlo y empezando a caminar para llegar a la sala de espera, donde se habian quedado mis hermanos y mi papa, apenas los divise los empece a presentar -mira, te presento, estos son mis hermanos, Rafael es el alto castaño y Max el arandano a su lado...

-Oye, ya no soy tan pequeño como para que me presentes asi -Max me interrumpio casi de inmediato haciendo un puchero.

-En esta familia siempre seras nuestro arandano, no importa si tienes nueve o veintinueve -le respondi mientras le jalaba el cachete.

-No quiero ni imaginar cuando tenga novia -susurro por lo bajo, pero todos lo escuchamos y como muestra de ello, Rafael salto para colocarse a su lado y pasar su brazo por sus hombros, para luego decir.

-¿Que fue eso Maxi?, ¿ya vas a dejar de solo leer libros de romance y buscaras tu propia historia? -pregunto con esa misma sonrisa santurrona que hizo cuando empezo a notar todos los bocetos del chico de mis visiones, Draco, espero que no lo recuerde bien, no quiero esa sonrisa otra vez dirigida a mi.

Bueno eso era esperar demasiado, ni mas termino de volver morado a Max con su sonrojo, se volteo con esa misma risa y una mirada de conocimiento.

-Y tu rubiecito, ¿como te llamas?, debes de ser agradable si ya Harry te trae directamente hacia nosotros para presentarnos y mas si te trae de la mano -comento levantando para luego bajar las cejas en un gesto burlon, haciendonos enrojecer a ambos hasta las orejas y soltarnos inmediatamente, habia olvidado que lo habia agarrado de la mano, demonios, por que el es el que tiene la actitud mas parecida a papa Magnus, esto es una tortura, incluso puedo sentir a Atenea conteniendo la risa en mi nuca, la traidora esa.

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