CAPÍTULO 15 🖤

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¿Federico?

Volteo y no respondió.
Cristina cerro sus manos como puños y se acercó rápidamente arremetiendo contra su pecho.

C: ¡Eres tú desgraciado, eres tú!!. ¿Por qué lo hiciste?! (mientras sollozaba)

F: Cristina, Cristina ( intentando detenerla)

C: Yo te amaba, sí te amaba y me mentiste! Me mentiste.

Pero Federico intento abrazarla y ella no tuvo más remedio que rendirse antes esos brazos que tanto había extrañado sin dejar de llorar.

Segundos después, y como tomando conciencia de la situación, se aparto de él.

C: Sueltame...

Lo miró detenidamente un tanto asombrada, pues aquel hombre era tal como lo imagino.

F: Cristina ( Murmuró en un susurro ahogado)

Las lágrimas amenazaban con salirse e intento tocar su mejilla pero ella lo impidió.

C: ¿A qué viniste? (Dijo mientras se secaba los ojos con el puño de su bata).

F: Parece mentira que puedas verme.

C: Si...ya no tienes que sentir pena.
( Respondió irónica)

F: No digas eso, jamás sentí pena y eso lo sabes bien. Eres una mujer muy capaz en todos los sentidos.

C: Si, claro...

F: ¿Podemos hablar? Aunque sé que estás ocupada.

C: ¿Para qué? creo que no hay nada que decir, todo me resulta bastante claro.

Ella evito su mirada volteando hacia el costado.

F: Por lo visto estás rehaciendo tu vida.

Cristina quiso herirlo y no tuvo mejor idea que aseverar.

C: Si.

Rivero tuvo que respirar hondo conteniendo los celos que le causaba oír decir aquello de su boca.

F: Pues, que rápido te olvidaste.

C: ¿Y que esperabas? ¿Que me quede llorando por ti?

F: Tú no eres así.

C: Quizás antes no. Quizás estaba demasiado vulnerable con mi ceguera. O me veían como estúpida a la que podían mentirle.
Eso se acabó Federico. Ahora nadie va a burlarse de mi. Ni tú, ni nadie.

F: ¡Yo no me burle de ti!..

C: ¿Ah no? Siempre lo supiste, aún ante el dolor que me causaba no saber quién había sido el cobarde que huyó del accidente. Te callaste y al final habías sido tú.

F: ¡No, no lo supe hasta que pasamos la primer noche. Cuando me contaste el motivo por el que no podías ver!

Ella volvió a mirarlo.

F: Ahí me di cuenta que quien te habia chocado, era yo. No sabes lo fatal que me sentí Cristina. No te imaginas la culpa que tenía.

C: "Culpa". Y por eso seguiste conmigo.

F: No, yo pensé en alejarme, pero ya era tarde. Ya me había enamorado de ti y no iba a dejar que nada se interpusiera.

C: ¿No pensabas decírmelo, nunca?

El suspiró.

F: Siendo sincero, no.

C: ¿Por qué?!!

F: ¡Porque iba a pasar esto! ¿Me hubieses perdonado si te lo hubiese dicho yo mismo? ¿O si te lo hubiera confesado ni bien me entere? No, de seguro te ibas y me dejabas!

Redención ⚖️ (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora