14. Perdido sin ti.

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ALEX:

- ¡Por fin vacaciones! - Gritó Jack cuando salimos del instituto.

- No te motives demasiado que solo es una semana. - Dije con una sonrisa ante la mirada mortal que me estaba lanzando.

- Más vale eso que nada.

Jack me tomó de la mano y le miré un poco avergonzado, no es que no me gustase, todo lo contrario, pero aún me parecía un poco extraño que estuviésemos así delante de otros, nosotros que siempre nos habíamos presentado delante de los demás como mejores amigos, ahora era un secreto a voces que nos amábamos. Sinceramente me sentía el hombre más afortunado del mundo.

Hoy empezaba al fin esa semana de descanso por la que habíamos estado esperando tanto tiempo, y no había algo que me hiciera más ilusión que pasarme todas las horas junto a mi perfecto novio y los que ahora consideraba mis mejores amigos, Kellin y Vic. Pero primero teníamos que preparar todo, y ese era el motivo por el que todos caminábamos juntos hacia la casa de Vic, el plan era irnos de acampada, y mientras Kellin y Vic parecían estar muy ocupados odiándose el uno al otro, por nuestra parte Jack y yo seguíamos en nuestro plan de unirles.

Si algo habíamos aprendido en todo este tiempo es que esos dos están hechos para discutir siempre sobre tonterías y formar de ello un gran drama. Siempre era divertido verles, en el fondo, muy muy en el fondo, sabemos que realmente no se odian, simplemente son como dos elementos químicos que reaccionan de esa forma al estar en contacto el uno con el otro, como dos polos opuestos que a pesar de las diferencias se atraen.

Me tensé al ver entre todas las casas la de Vic, aún seguía siendo capaz de reconocerla, ¿cómo olvidarla? Fue ahí donde cometí errores creyendo que estaba en lo correcto, y donde me dejé seguir erróneamente por eso que dicen de que un clavo puede sacar otro clavo. Jack notó que algo pasaba y me miró con esa tierna cara de preocupación que pone siempre, me hacía sentir mal, sentía como si alguna vez le hubiese engañado aún si no estábamos juntos por ese entonces y no tenía la mente muy clara.

- Lo siento. - Dije en susurro para que los chicos que iban caminando delante de nosotros no nos escuchasen.

- Te quiero. - Fue lo único que me respondió antes de darme un beso que resultó ser más largo de lo que me esperaba, con él definitivamente me había tocado la lotería.

- Tortolitos, ya hemos llegado. - Oímos decir a Vic que ya se había adelantado bastante y estaba abriendo la puerta. - Siento que hayáis tenido que venir caminando, mi coche todavía está en el taller y no sé para cuándo lo tendré de nuevo.

- No pasa nada, hacer ejercicio es bueno para la salud. - Señaló Jack sacando como siempre su lado más positivo.

- Bueno, mis padres no están en casa y mi hermano se ha quedado charlando con unos amigos, ya vendrá después, lo que significa que de momento tenemos toda la casa para nosotros solos.

Subimos las escaleras hasta su habitación y nos sentamos en círculo en el suelo, todo estaba como lo recordaba y me ponía enfermo que me viniesen tantos recuerdos con Vic en este lugar, sobretodo mientras tenía a Jack a mi lado.

- ¿Cuándo vamos a ir? - Habló por fin Kellin que hasta el momento no había intervenido ni una sola vez. Últimamente pasaba mucho, aunque tuviese una presencia muy silenciosa estaba seguro de que en su cabeza debía haber algo muy "ruidoso", le pasaba algo y sabía que Jackie también lo había notado.

- ¿Qué tal pasado mañana? Así tenemos un día para descansar y preparar las cosas antes de irnos. - Todos parecimos estar de acuerdo con la idea de Vic y así seguimos proponiendo ideas por un buen rato.

Forever and Always (Kellic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora