Forever and Always (Kellic)

16. Los recuerdos visibles que intentamos ocultar.

KELLIN:

Cuando desperté Vic y yo estábamos abrazados, anoche hacía quizás bastante frío, eso era al menos lo que quería pensar. Después de mucho tiempo sin hacerlo una pequeña sonrisa se dibujó en mis labios cuando lo vi aún durmiendo, tenía unos párpados largos ahora que me fijaba bien, y también unas mejillas hinchadas, adorable, parecía un bebé. Me fijé bien en su expresión calmada, en cada pequeño detalle de su rostro como en sus labios imponentes, y en su respiración acompasada. La imagen en sí me transmitía mucha tranquilidad, podría haberme pasado todo el día mirándole así.

- Vic, despierta ya. - Oí gritar a Alex fuera de la tienda mientras la agitaba un poco. - Me giré rápidamente para que Vic no supiese que estaba mirando para él y fingí estar dormido.

- Mmmm joder, no quiero salir. - Le escuché decir en un susurro y con voz de dormido. No hizo ni un solo movimiento por unos segundos, así que me asusté cuando me susurró en el oído. - Buenos días Bella Durmiente, es hora de levantarse.

- ¡No vuelvas a hacer eso! - Dije dando un pequeño salto e intentando incorporarme sin darme cuenta de que él estaba sobre mí, lo que provocó que nuestras cabezas chocaran con fuerza.

- ¿Pero qué coño te pasa? ¿Me quieres matar? - Dijo con un aullido de dolor.

- ¡Eres tú el que me asusta! ¿Qué te esperabas? - Grite como si estuviésemos solos, pero afuera se escuchaba la risa de Alex. "Siempre están igual, no paran" le oí decir a alguno de los otros dos chicos.

Estaba sentado con la vista perdida en mis manos con las que jugaba nervioso, y cuando al fin levanté la vista, vi cómo Vic me miraba fijamente.

- Tienes las mejillas rojas. - Fue lo único que dijo riéndose antes de salir.

- Idiota. - Dije para mí mismo sabiendo que él ya no me podía escuchar. Me tumbé otra vez boca arriba y me tapé la cara con las manos, ¿qué me estaba pasando?

Pasando unos minutos por fin salí a desayunar con los demás, aunque no tuviese demasiada hambre igualmente me senté con ellos y en poco devoramos lo que habíamos traído para comer. Nos iríamos por la tarde, así que Jack y Alex se pusieron a jugar a las cartas para pasar el rato, y no mucho después se les unió Vic que les empezó a dar una buena paliza a los "tortolitos" como él los llamaba. Yo me sentía un poco fuera de la escena, así que decidí ir a dar un paseo rezando por no perderme gracias a mi horrible sentido de la orientación.

- Hey, Kells ¿dónde vas? - Preguntó Mike que tenía pinta de estar aburrido.

- A dar un paseo.

- Espera, te acompaño. - Dijo corriendo hacia mí con una sonrisa. Antes de darle la espalda a los demás chicos y alejarme con Mike, miré de reojo a Vic que nos miraba atentamente pero sin ninguna expresión notable en su cara.

Nos echamos a andar en silencio, escuchando solo el movimiento de las hojas de los grandes árboles y el sonido del viento, era un lugar bastante bonito.

- Oye, siento no haber dormido contigo anoche, yo... la verdad es que no tengo ninguna escusa y lo único que puedo hacer es disculparme.

- No te preocupes por eso. - Dijo con una sonrisa. - ¿Pasaste la noche con mi hermano ? - Suspiró.

- Sí, bueno, compartimos tienda. - Esperaba que no malinterpretase algo que realmente no había pasado. 

- ¿Te gusta? - Dijo parándose y mirándome. 

- ¿Vic? No, claro, que no. - Estaba confundido, ¿a qué venía esa pregunta?

- Oh, está bien. - Mi miró con una sonrisa como si estuviese admirándome y poco después se acercó un poco a mí. - ¿Sabes que tienes las mejillas rosas? - Inconscientemente me llevé las manos a las mejillas.