Forever and Always (Kellic)

6. Si te enamoras estás jodido.

VIC:

- Cógeme de la mano. - Me dijo Kellin nervioso. Ya habían pasado unas horas desde que Alex se había despedido de Jack y se había marchado, y ahora, cuando se disponía a descansar era la hora de que comenzara el plan. Tomé su mano temblorosa y le agarré fuertemente. - No me sueltes por favor, necesito tu ayuda.

- Relájate, todo va a estar bien. 

- No quiero hacer esto. - Se quejó como un niño pequeño.

- No será tan malo, imagínate que estás viendo una película, solo eso. Lo único que necesitas es concentrarte.

- Una película... como no sea una película porno. Para colmo lo tengo que hacer contigo.

- Si lo prefieres me puedo ir. - Dije levantándome.

- No, por favor. - Me miraba con esa cara de perrito asustado mientras me apretaba la mano con fuerza. - Solo digo que... será raro el hecho de estar mirando esto con una persona que apenas conozco.

- Pues... imagínate que soy tu novio. - Al instante me arrepentí de mis palabras. - No sé, a lo mejor así no te da tanta vergüenza. - Intenté explicarme.

- ¿En serio? Será como jugar a las casitas. - Dijo con una pequeña risita, era simplemente adorable.

- Pues serás la chica de esta "relación." - Vi cómo en sus labios se formaba una sonrisa triste, ¿por qué? se suponía que mi comentario debería haberle hecho enfadar, no ponerse triste.

- Es estúpido. - Le miré confundido, realmente a veces era difícil adivinar lo que le pasaba. - Me estás pidiendo que te trate como si fueses mi novio para que esto no me dé tanta vergüenza y sin embargo no sé cómo hacer eso. No sé lo que es estar en una relación.

- Espera... ¿nunca has salido con nadie? No me lo creo.

- ¿Por qué no me crees? Te estoy diciendo la verdad. Sí, sé que con mi edad...

- No es por eso. - Le interrumpí y él me miró con curiosidad. - Es que eres... no sé, eres... 

- ¿Soy? - Dijo impaciente.

- Lindo. - Me limité a decir, y él bajó la cabeza esperando sin éxito que no viera el color que invadía sus mejillas. "Mentiroso" le oí susurrar para sí mismo, haciéndome pensar que o no conocía la existencia de los espejos o realmente tenía una mala imagen de sí mismo.

- Siempre fui una persona demasiado tímida e introvertida, me daba miedo abrir la boca porque tiendo a decir lo que pienso sin siquiera pensar en lo que digo, aunque creo que de eso ya te habrás dado cuenta. La gente puede llegar a ser muy cruel, y ya se metían conmigo sin siquiera conocerme, quién sabe qué hubiese sido de mí si me hubiese abierto a la gente... Por eso nunca tuve amigos, pero estaba bien con ello, si yo hubiese sido otra persona tampoco me hubiese querido relacionar con alguien como yo, alguien que vive dentro de una burbuja y al que le da miedo el mundo exterior.  De hecho tú eres lo más parecido a un amigo que he tenido nunca.

- Deberías valorarte un poco más. Estoy seguro de que podrías haber hecho muchos amigos, porque aunque tú no seas capaz de verlo, eres una persona genial Kellin. - Me encantaba que me contase cosas sobre él, que fuese capaz de abrirse y confiar en mí, pero a la vez me daba pena que una persona tan maravillosa como él no se valorase.

- Me alegro de haberte conocido, muchas gracias por todo. - Pude ver lágrimas en sus ojos antes de que se inclinase para darme un fuerte abrazo. - Créeme cuando te digo que cuando todo esto termine no te voy a olvidar. Recordaré cada momento y cada sonrisa tuya, es muy difícil hacerte sonreír, pero deberías hacerlo más, no quiero ver triste a mi único amigo.