"Eh, ahí estás"
"Me voy"
"¿Qué? ¿Por qué?"
Draco me mira con el ceño fruncido. Yo examino la habitación de reojo, preguntándome dónde está Fred, si me estará mirando, si a caso es capaz de verme y darse cuenta de lo afectada que me dejó.
"Me duele la cabeza" le miento.
Él me mira extrañado.
"Vale, me voy contigo"
"No" le digo, deteniéndolo. "No, quédate. Te gustan estas cosas. Yo estaré bien. Tomaré una poción para el dolor y me iré a la cama"
Salgo de ahí antes de que pueda protestar.
Mi casa está vacía, como siempre. Me sigo diciendo a mí misma que debería hacer algo al respecto. Cubrir los muebles e irme a algún lugar más pequeño hasta que mis padres terminen su sentencia. Los miles de metros cuadrados de esta mansión se sienten como un recordatorio constante de mi soledad, pero por algún motivo no puedo hacerlo.
La casa es lo último que me queda de ellos mientras estén encerrados, y aunque sea aterrador estar aquí sola, no logro dejarla ir.
Me doy vueltas en la cama, sin poder sacudirme esa sensación que se me asentó en la nuca desde que Fred puso su mano sobre mí. Un escalofrío que no puedo sacudirme de encima.
La chimenea de la habitación, que los elfos mantienen encendida para que la casa esté abrigada, se enciende en una llama verde brillante y un pergamino sale disparado desde el fuego hacia mi alfombra.
Polvos flu.
Me pongo de pie y voy por él, y aún antes de recogerlo, ya sé de quién quiero que sea.
"¿Otro juego?"
Busco en mi mesita de noche por un poco de pergamino.
"¿Cómo conseguiste mi dirección?"
La chimenea se ilumina de nuevo al recibir la respuesta.
"Te fuiste de mi casa usando mi chimenea. Los polvos flu dejan rastro. Deja de evitar la pregunta"
Me quedo mirando su caligrafía pulcra y elegante como si pudiera decirme algo nuevo si la miro lo suficiente.
"¿Verdad o reto, Weasley?"
El papel no se demora nada en llegar.
"Reto"
Sonrío.
"Te reto a que vengas a verme"
Mi mensaje se va a través de la chimenea antes de que pueda pensármelo dos veces. Desaparece en una llamarada verde viva y yo me quedo a solas. Esperando.
La siguiente vez que la chimenea se ilumina, es él quien llega a mi habitación.
Examina el lugar con ojos curiosos y divertidos. En todo momento lo veo calmado, como si tuviera todo el tiempo del mundo y ninguna prisa.
"¿Me extrañaste?"
Me muero de la vergüenza cuando pienso que sí. Cuando me doy cuenta de que su beso es lo único en lo que he pensado durante la última hora, que no he podido conciliar el sueño pensando en él y que, cuando intenté tocarme para calmar esto que siento, su rostro se coló en mi mente cada segundo.
"Esa no es la pregunta que tienes que hacer"
"¿Verdad o reto?" me pregunta acercándose a mí.
"Reto" le digo esperando con anticipación.
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𝐠𝐚𝐦𝐞𝐬 • 𝐟𝐫𝐞𝐝 𝐰𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧
Fanfiction"Juguemos un juego" "No, gracias" "No sabes de qué va el juego" "Ya me hago una idea de qué van tus juegos" Iris Black siempre se mantuvo alejada de los Weasley por una razón. No tenía nada en común con ellos. Hasta que una noche, su primo Dra...