𝟬𝟮𝟲.

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Manisa, la provincia qué se le asigna al primogénito de un sultán. Regla la cuál el gran sultán Süleyman rompió dándola a su segundo hijo, al hijo con la mujer qué ama.

Ilyas. — Mehmed llamó a su amigo el cuál se encontraba afilando su espada.

— Dígame, alteza. — El agha volteó a verlo dejando su espada recargada en un toldo, pues se encontraban en el jardín tomando un descanso después de casi dos horas de entrenamiento.

— ¿Crees qué sea buen padre? — Preguntó con su ceño fruncido. — No sé si sepas pero Shahnaz y yo somos pareja y antes de venir a Manisa me enteré qué está embarazada, estoy nervioso. — Dijo de manera honesta mientras miraba hacia el jardín.

— Ilyas se sorprendió al enterarse de aquella relación y más al saber qué la sultana está embarazada, pero dejando eso de lado, ya sabía cuál sería el próximo plan de la sultana Mahidevran. — Créame alteza será un buen padre, puedo ver cómo es con la sultana Nergis, por supuesto qué lo será. — Dijo con una sonrisa falsa.

Lo sé, lo sé Nergis es la hija qué siempre desee. — Le dijo mientras recordaba la primera vez qué conoció a aquella niña, ahora joven.

— Y me alegra verlo feliz, mi príncipe. — Ilyas dijo nuevamente pero está vez con seriedad, cosa qué el príncipe dejo pasar.

• • •
En el harén.

— Muchachas, ¿alguien a visto a Rasha o a Cevri Hatun? — Preguntó una de las amigas de la castaña.

— Seguramente Rasha ya se encuentra en el fondo del mar, Victoria. — Dijo una mujer rubia.

— Qué Allah no lo permita. — La sorpresa de Victoria se transformó en una de preocupación, pues las palabras de aquella muchacha rubia la dejo pensativa.

— ¡ATENCIÓN! LA SULTANA NERGIS ESTÁ AQUÍ. — Gritó Süleyman Agha, haciendo qué las mujeres se levantaran para hacer una reverencia.

Una vez qué informo y las muchachas hicieron una reverencia entonces la joven entro al harén, enojada

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Una vez qué informo y las muchachas hicieron una reverencia entonces la joven entro al harén, enojada.

Una vez qué informo y las muchachas hicieron una reverencia entonces la joven entro al harén, enojada

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𝐒𝐇𝐀𝐇𝐍𝐀𝐙 || 𝐒̧𝐞𝐡𝐳𝐚𝐝𝐞 𝐌𝐞𝐡𝐦𝐞𝐝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora