Daphne.
Fue realmente impactante todo lo que Kristen me acaba de contar, nunca me lo esperé.
—Preciosa, te entiendo. Entiendo por todo lo que tuviste que pasar. Por ello eres de pocas amistades ¿No?
—Sí. Me cuesta confiar en las personas por eso. Desde que conocí a Idara qué se volvió alguien tan importante en mi vida, sé que ella no me defraudaria. Solo la tengo a ella.
—Y también a mí. ¿Lo sabes, no?
—Sí, gracias, gracias, gracias.
La beso incontables veces por toda la cara.
—A todo esto... ¿Y sí lo hacemos oficial? —enarco una ceja y sonrío.
—¿Qué....? Oh no.
—Eres la única chica que quiero en mi vida, con quién quiero compartir cada momento de mi existencia. No quiero que me hagas feliz, quiero ser feliz contigo. ¿Puedo ser tu novia, Kristen Whitney?
Me quedo a la expectativa de una respuesta que no tarda mucho en llegar cuando ella me besa y asiente con la cabeza.
—Sí. Sí puedes ser mi novia, Daphne Abbey.
Está vez la beso con pasión, amor y toda la ternura que ella me genera.
—Tengo un regalo para ti. Bueno, básicamente lo compré para las dos —me mira sonrojada.
Saca una pequeña caja de su mochila y al abrirla se encuentran los collares del yin y yang.
—Están hermosos.
—¿Sí? Los vi y pensé inmediatamente en nosotras —se ruboriza y aparta la mirada.
—Para ti el negro y para mí el blanco.
Ella me lo pone y yo hago lo mismo con ella. La atraigo hacia mi para quedarnos unos cuántos segundos así, queriéndome quedar para siempre.
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Sabía que algo estaba pasando entre este par cuándo vi las miradas, las sonrisas y el coqueteo por parte de los dos. Y vaya, qué sorpresa nos dieron ¿Eh?
—¡Tonto, no me toques el pelo!
—Bien que te gusta que lo haga en otras ocasiones, ¿no? —se ríe malicioso.
—¡Cállate! ¡Eso no se cuenta!
—Ya basta, par de tortolos.
—Mejor díganos ¿Desde cuándo?
—¿Desde cuándo qué? —Axer expresa confundido.
—Idiota, que desde cuándo esto —se señalan—, tú y yo, yo y tú y ajá, eso.
_Ahhhhhh, díselos tú.
—¡¿Y yo por qué?!
—Por qué sí, eres la que manda ¿No es así?
Nos reímos todos e Idara suelta un bufido cansada.
—Ya, ¿desde hace unas semanas? No sé.
—¿Cómo que no sabes? Yo sí sé.
—A ver, dilo pues.
—Desde hace un mes.
—¡¿QUÉ?! —gritamos Kristen y yo al mismo tiempo.
La gente alrededor del bar-restaurante nos ve con cara de: ya callense, malditos locos.
—Ay, shhh, no hagan tanto escándalo.
—Se lo tenían bien guardado ustedes dos ¿No? —Kristen enarca una ceja y dios, como me encanta cuándo hace ese gesto.
—Oye —me susurra Axer—, disimula un poco que te gusta ¿No?
—Cállate.
—¿Y ustedes ya son o no novias? —Idara dispara la pregunta directamente.
—Sí, ya lo somos.
—¡SÍIIIIIIII!
Idara y Axer se chocan las manos mientras hacen un bailecito raro. Que gente tan extraña, de verdad.
—Voy al baño, ya vengo.
Kristen se para de la silla para ir al baño y yo me quedo conversando con estos par de locos un tiempo más.
—Oigan, cómo que ya se tardó, ¿no?
—Es cierto, voy a ir a ver qué sucede.
Me paro de la silla y voy al baño ya que Kristen se ha tardado más de quince minutos y no ha vuelto. Y justamente en la entrada me topo con una escena nada agradable de ver.
•••
Faltan unos cuántos capítulos más y se acaba mi bebé. *Llora en mamá sentimental*¿Que creen que vió Daphne?
¿Se esperaban lo de Idara y Axer?
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Inevitable Destino ✔️
Teen FictionA Kristen le cuesta volver a confiar en el amor por su primera pareja, pero cuándo ve a esta persona se le acelera el corazón y su mundo se detiene. Daphne nunca ha tenido una relación, pues la chica de sus sueños es nada más y nada menos que Kriste...