Kristen.
Con el paso de los días Daphne y yo comenzamos a pasar aún más tiempo juntas. Tanto que justo ella hoy vendrá a mi casa a dormir. Luego de la charla que tuvimos ese día después de que todo se mal interpretara, la relación se ha fortalecido teniendo más comunicación, confianza y respeto.
¡Dios! Nunca me sentí así, ni siquiera con la primera relación que tuve. Daphne me gusta muchísimo, me encanta, es algo indescriptible de explicar.
—¡Cariño, baja!
Bajo las escaleras encontrándome con mamá y una bandeja llena de comida.
—¿Qué es todo esto? —frunzo el ceño.
—¿Cómo de qué? Para ti y tu amiga.
Me tenso, recuerdo que no le he contado a mamá que ya es mi novia, bueno, en realidad no se lo hemos contado a nuestros papás.
—Claro, graciaaas mamá —subo rápidamente a la habitación dejando la comida en la mesa.
Vibra mi teléfono.
Daphne: preciosa, saldré de mi casa ya
Kristen: vale, aquí te espero
Daphne: y el "mi amor"? :(
Kristen: vale, aquí te espero mi amor
Daphne: así me gusta, chau
Kristen: ¿otra vez chateando mientras manejas?
Daphne: en semáforo rojo, lo prometo
Kristen: muévete
Daphne: ya llegué
Kristen: ya voy amor, espérame
Daphne: ¿a ti? todo lo que quieras
Bajo corriendo hasta llegar a la puerta y abrirla para encontrar a Daphne con los brazos cruzados y sonriendo.
—Hola, preciosa —se acerca para darme un beso pero nos interrumpen.
—¡Daphne, llegaste cariño! —mamá se atraviesa mientras nos alejamos lo suficiente para no levantar sospechas aunque ya es bastante obvio.
—Hola, señora Amelia —le da un corto abrazo y le sonríe.
—Vamos, pasa, pasa, estás en tú casa.
—Mamá, te recuerdo que vino por mi, no por ti —suelto un bufido a la vez que entro para cerrar la puerta.
Daphne me mira arqueando las cejas pero se ríe. ¿Qué es tan gracioso?
—Ay, no seas así Kristen, sé qué vino por ti pero ¿Ya no la puedo saludar? —me mira cruzando sus brazos.
—Nunca dije que no.
—Señor de los cielos, ilumínala —se va negando con la cabeza pero antes grita: —, ¡Estás en tu casa, Daphne!
—¡Gracias, señora Amelia!
Sonríe y yo me acerco hasta ella para susurrarle al oído.
—Hola, mi amor.
Y me subo corriendo hasta la habitación a lo que ella me sigue.
—¡Oye! No puedes hacer eso y estar cómo si nada —me voltea acercándome a ella.
—¿Por qué no? —arqueo una ceja.
—Porque me pones ¿No lo ves? —susurra, lleva un dedo mío hacia su boca y lo lame.
Su acción me deja embobada poniéndome caliente. Carajo.Suelta mi dedo y me lo lleva a mi boca a lo que yo lo chupo cómo cuán niño con su paleta y la veo directamente a los ojos. No aguanta y me besa ferozmente agarrándome del cuello y acorralandome contra la puerta mientras se pega a mí restregándose. Le muerdo el labio inferior y se lo lamo.
—Te amo, Daphne —expreso agitada.
—Te amo aún más, preciosa —está vez me da un beso más lento y delicado.
•••
¡Holaaa, holaa!
Volvemos por aquí a leer a mis nenas.Este capítulo me encanta.
Nos estamos acercando cada vez a la recta final, ¿están preparados? porque yo no.¡Llegamos a 1k de lecturas!
y es por eso que lo celebramos con una preciosa ilustración que me hizo una amiga mía <3Créditos a: strengeepiphany está divina 🥹🫶🏻💗
¡No olvides votar, comentar y compartir! <3
ESTÁS LEYENDO
Inevitable Destino ✔️
Roman pour AdolescentsA Kristen le cuesta volver a confiar en el amor por su primera pareja, pero cuándo ve a esta persona se le acelera el corazón y su mundo se detiene. Daphne nunca ha tenido una relación, pues la chica de sus sueños es nada más y nada menos que Kriste...