Shining on your night [Minjeong | Terminado]

Parte 3 Capítulo 7

Pero, ¿será tan fácil que eso suceda?

¿Lo será?

[Hospital, Seúl, Korea]

Jeongin: Lix, ¿ya estás mejor? El doctor dijo que te iba a dar algunos calmantes para el dolor. Realmente pensé que no era algo tan malo, pero parece que no es así, y yo... yo enserio me siento mal por ti. No debiste acompañarme a mi trabajo y ayudarme a traer lo que me faltaba de casa, enserio yo no-

Felix: Innie, todo está bien, no es tu culpa, yo en realidad quería eso. Quería ayudarte -toma su mano y lo calla, con una sonrisa, acercándolo levemente para sobar su mejilla con la misma mano, al no poder hacer nada con la otra. En ese momento, Jeongin se calma.

Guarda silencio porque ve verdad en esos ojos.

Verdad que no ha visto en otra persona desde la vez en que terminaron. Sin embargo, Jeongin no quiere pensar en ello, porque simplemente su memoria y su mente están llenos de Minho. Está tan lleno de ese idiota, que cuando este soba su mejilla, comienza a llorar sin razón, haciendo que el mayor se asuste.

Felix: ¿Jeongin-ssi? ¿Innie, por qué lloras?

Jeongin: Soy un tonto, Lix. Soy un estúpido en creer que él me amaba. Pero aunque sigamos juntos... ¿no crees que eso valdría de nada? Aún así, lo amé. Lo amo, Felix. Lo amo.

Logrando que se asuste porque jamás había visto a Jeongin de esa manera, no desde que estuvieron juntos. Pero ahora esas lágrimas no son suyas, y sabe que jamás lo serán. Pero no se puede rendir, no puede.

No puede haber sido por nada, los días en que se pasó creando cuentas y cuentas falsas para apoyar el webtoon de la novela de su ex pareja.

Una exitosa por cierto.

No puede haber sido por nada, el que se haya convertido en el mejor fan de Jeongin en secreto, y haber comprado todas sus novelas de la librería más cercana cuando fue el primer día de su publicación. No puede haber costado de nada,ver su gran sonrisa a lo lejos y no haberse acercado. No puede haber valido de nada, esforzarce en seguir cerca suyo.

Además contrató a Seungmin, como su dibujante, ¿qué es lo que más necesita?

¿Qué debería cambiar para parecerse a Minho?

¿Qué?

Felix: Jeonginnie, no llores. No me gusta que te veas así, no sabes cuando duele -entonces tras pensar en eso, sólo termina diciéndole esto al menor, haciendo que en medio del pasillo donde esperaban al doctor, trate de limpiar todas sus lágrimas, una a una.

Todo antes de que se levante de su asiento y abrace al menor fuertemente. Todo antes de que en medio de ese abrazo, y con una camisa aún desabrochada por sudar al haberse quedado dormido por el suero, lo miré fijamente y cuando un mayor llega a lo lejos apenas, sea participe de esa cercanía que no hace más que ponerlo muy inseguro.

Que logra ponerlo celoso.

Entonces sabe como se siente su propia dolor. El dolor que él mismo causó.

Aun así, no quiere darse por vencido. Pero para que esto sane, deben estar lejos el uno como el otro, ¿verdad?

Minho: Jeongin.

《¿Te sigue gustando?》

《No, que va. ¿No estamos juntos? El sólo es un amigo, no te preocupes. Es normal, porque ahora vamos a trabajar juntos. Pero te juro que no va a pasar nada, te lo prometo.》

《¿Es ese la chaqueta de Minho, Juyeon?》

《Me lo encontré, sólo me lo dio porque tenía algo de frío, ¿te importa? ¿No estás celoso, no es cierto?》

《Hyung, ¿no tenías una chaqueta ayer?》
《Ah... ¿esa? Supongo que la perdí, tranquilo, no es importante.》

《¿Te parece aún lindo, Juyeon?》.
《Sí, supongo, ¿no? Es lindo, también eres lindo, hablemos luego, ¿bien?》

《Hyung, ¿cuándo te enamoraste de mí?》
《... Supongo que no recuerdo bien... ¿te lo diré luego, sí?》

Sin embargo, ¿cómo puede hacer eso después de que sabe que le gusta? ¿Cómo estar lejos del otro? Es lo que piensa llamando su nombre. Es lo que piensa mientras lo ve voltear hacia él, luego de oírlo, mirándolo como nunca antes, roto y más que triste.

Esto es lo causó. Entonces lo entiende.

Lo entiende, pero no se detiene y camina hacia ellos, ante la mirada puesta sobre él de la persona que realmente le gusta. Pues le gusta. No. Esta es la persona que realmente ama y no quiere que se vaya.

No quiere que lo deje. No él.

Jeongin: Hyung, ¿qué haces aquí? ¿Quién te dijo que estaba aquí?

Minho: Tranquilo, yo mismo lo averigüé. Felix es amigo mío también, así que estaba preocupado, yo no quise- no quise molestarte... pero ahora que te puedo ver, ¿podríamos hablar un momento por favor? ¿Felix, te importaría que él y yo habláramos?

Jeongin: Hyung, nosotros no tenemos qué hablar.

Minho: Innie...por favor...

Felix: Sí Jeongin dice que no tienen de que hablar, entonces, ¿por qué no lo dejas tranquilo?

Sin embargo, a simple vista, sabe que perdonarlo no va a ser tan fácil. Sabe que ganarse la confianza será aún más difícil, y que teniendo a ese pecoso cerca suyo será aún peor, pues puede darse cuenta de sus intenciones. Y aunque odia que este las tenga, no puede decirle nada al respecto.

No tiene el valor para reclamar nada.

Minho: Disculpa, pero no estoy hablando contigo, es con mi novio.

Felix: Él no es-

No tiene el valor de exigir amor de alguien que ya le dio todo.

Jeongin: Minho, tú y yo no somos novios. ¿No te acuerdas que te fuiste para estar con alguien más? Creo que con eso me quedó claro que es lo que habías elegido.

Minho: Jeongin, eso no es cierto.

Jeongin: ¡¿Qué no es cierto?! Tú- -aprieta la mandíbula, impidiendo que algunas lágrimas caigan de sus ojos o que hiciera más bulla de la que ya están haciendo- como sea. No quiero hablar aquí. Espera que acompañe a Felix a que le cosan la herida, y hablamos. Aquí no podemos arreglar nuestros problemas.

No puede esperar delicadeza de alguien que ha dañado con sus acciones.

Minho: Está bien, todo lo que quieras, sea lo que sea, estará bien. Yo sólo quiero hablar contigo, no me importa esperar lo que sea con tal de hacer eso. No quiero perder la oportunidad de que me escuches. No quiero perderte, Jeongin, y-yo no lo quiero...

Y es por eso que va a recuperar esa confianza de su parte. Va a ganarse su cariño nuevamente cueste lo cueste, pelando con quien deba pelear, así sea consigo mismo.

Y se lo promete, mediante esos ojos llorosos que es visible para esas dos personas. Sin embargo, al verlos, no hay más que algo roto entre los dos. Algo que es capaz de ver el contrario.

Ese que viendo a tanto Jeongin y a Minho, cerca pero tan lejos a la vez, espera una sola oportunidad para ocupar el lugar del otro. Aún así, hay algo que ninguno se da cuenta, y es en lo que realmente siente Jeongin. Pues nadie se ha puesto a preguntárselo. Nadie le ha dicho que es lo quiere.

Sin embargo, eso no importa ahora, pues este ya sabe lo que tiene que hacer.