La Luz De Mi Reina (Saga Tu Luz # 3)

Capítulo: 1

Cinco meses antes.

Enika.

Me encuentro detrás del escritorio sentada en la silla presidencial de la empresa principal en los Ángeles la cual se trata de crear, exportar e importar todo tipo electrodomésticos de máxima calidad.

Hay un sin fin de marcas, y precios accesibles para todo clase de bolsillo. Por eso somos los número uno en ventas, también tenemos clínicas humanas que nos dejan buenas ganancias entre otras más.

Somos asquerosamente ricos, y como no si vinimos amasando fortuna desde hace siglos.

Enterarme que mi cuñada fue secuestrada y no poder hacer nada para ayudar me dejó muy mal.

Sobretodo saber que fue nuestro primo Dietrich, quien creíamos muerto hace siglos.

Lo peor es que Jazmín es la reencarnación de su mate Estefanía, una chica increíble, dulce y carismática.

Yo la quería mucho, lástima que mi papá cegado por la ira creyó que ella tenía que ver con los planes de tío Dominiko y la asesinó.

Supe que se arrepintió después al darse cuenta de que ella era inocente así como su sobrino que enloqueció de dolor y tristeza.

Por otro lado, echo que me pone feliz es que ya nació mi sobrina.

La pequeña Jade, esa cachorrita trae en su chiquito dedo meñique a su padre. Quien se desvive por complacerla.

Al punto de malcriarla, Jazmín tendrá un arduo trabajo para evitar eso. Y pensar que creía que sería mi hermano el de la mano dura.

Ja, es como un Lobezno con ella.

Sonrío complacida por el camino tan bueno en el que mi vida se dirige.

Muchas veces extraño a mi loba Athea y lágrimas de dolor escapan de mis ojos verdes.

No me arrepiento de haber rechazado al asesino de mis padres. Blake ya no insiste en explicarme nada con respecto a eso.

Más bien terminamos peleando porque hace tratados de paz con el asesino de nuestros padres, así que para no pelear pues no tocamos el tema.

Ahora tengo un almuerzo con el ex Alfa de Grecia Gaspar Talaminos. Supe que ya dejó a cargo de la manada a su primogénito Heros.

Recuerdo que jugamos muchas veces de niños. Quizás le vaya a visitar un día de estos.

Gaspar fue muy buen amigo de mi papá, y ahora mío y de mi hermano.

Manejo hasta el restaurante donde en la entrada nos encontramos Gaspar y yo para abrazarnos cariñosamente.

Sentir su abrazo fue como recordar a los abrazos de papá.

Ingresamos al restaurante y al ir hacia la mesa donde nos esperaban las otras personas con quienes comeriamos, y las cuales no conocía.

Me llevé una impresión al ver otra vez a mi primo Dietrich, Joder cierto que ya han pasado diez años desde que fue encarcelado.

Él me mira igual de impactado como yo. Dice mi nombre acercándose a mi que al tenerlo cerca le abofeteo para luego abrazarlo.

Es mi única familia aparte de Blake, jazmín y mis sobrinos.

Almorzamos recordando los buenos momentos de nuestra infancia. La cara de asombro de Dietrich cuando le dije que iría a conocer su manada fue épica.

Le aclaré que mi hermano no gobernaba mi vida, así que no dijo nada más cosa que agradecí.

Luego de eso nos despedimos porque él y su beta un gracioso Darius se subieron al avión que los regresaría a su país.