Una noche tranquila, mientras las gotas caían suavemente por el techo, dándole tranquilidad a los presente, dos mejores amigos de casi toda la vida, conociéndose desde los 8 años, durante todo ese tiempo, por que sentían en su corazón pasó la línea de lo que era amistad, sintiendo más allá de aquello.
Se enamoraron.
Y no temporalmente como solía ser con las demás mujeres que tuvieron en su vida, no!, lo que sentían era totalmente verdadero, aunque su amor ardiera en el fuego, nunca moriría, pues exactamente se sentía así..... Ardiente.
Desde cuando lo sentían?, ya no lo recuerdan, paso tanto tiempo que el amor seguí ahí, pero los recuerdos se borrarán tan sólo un poco.
Tulio invitó a su mejor amigo a pasar a su casa después de descubrir que la había apostado nuevamente. Estaba enojado con el por su irresponsabilidad, pero estaba algo preocupado, su amigo se volvió un adicto a aquello desde hace años, y en vez de ir desapareciendo con el tiempo, se volvía cada vez más frecuente, así que se aseguró que su amigo ya no apostará más su dinero ni sus objetos preciados.
--Te lo vuelvo a repetir idiota, no necesito que te encargas de mis cosas y mucho menos de mi, sabes que se cuidarme sólo.-- dijo intentando nuevamente convencer al mayor que lo dejara en paz.
--Lo hago por que se que en menos de una semana volverás a dormir en un basurero y ya no tendrías nada de dinero. -- dijo tranquilo mientras miraba a su amigo con una leve sonrisa.
El contrario ya no supo que decir, hasta que recordó que el mundo mismísimo Tulio tiene una lavadora para lavadoras.
--Al menos yo no gaste mi dinero en objetos sin sentido o inservibles.--.dijo intentando contratacar al contrario.
--Pero si en razones estúpidas.-- dijo sin mirarlo. --Y si vemos una película?, !mis sirvientas harán palomitas si deseas!-- dijo dándole cuenta que el más bajo empezó a enojarse más de lo que ya estaba hace momentos.
El otro sólo suspiro aún con enojo, sin decir nada, se sentó en el sofá, mientras que el contrario o tomo como un si, y con una sonrisa se dirigió a la cocina.
No fue lo mejor, pero disfruta aquella noche con su amigo.