capitulo:8

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Camino a paso rápido sin detenerme a nada, visualizo a Jheremy a lo lejos y cierro los ojos agobiada y cansada por tener que cruzarme con tantos imbéciles a lo largo de mi día. Me doy media vuelta tratando de huir pero allí está el agente capullo mirándome de manera espeluznante.

_por fin te encontré._su voz grave me eriza la piel.

No sé porque su voz provoca que mi cuerpo reaccione de una manera desconocida. Suspiro dándome ánimos para poder soportar este día y fingir que no me aborrece estar cerca suyo.

No parecías  aborrecerlo cuando te besaste con él y lo disfrutaste.

_parque querías verme.

Ensaña su sonrisa, ¿ a caso piensa que va ha lograr seducirme con esa estúpida sonrisa?.

_estaba preocupado por ti._se acerca a mí, no respetando mi espacio personal._en la mañana te vi un poco histérica.

Me paralizo ante el recuerdo de ese instante en el que sentí como me perseguían y después Jheremy besándome de manera brusca. Pienso en gritarle, en decirle que se puede meter sus preocupaciones en donde no le dé el sol, pero recuerdo las palabras de Cinthia diciéndome sobre la venganza.

_no fue nada, tuve una pesadilla._trato de restar importancia a aquel suceso.

Asiento analizando mis palabras para luego acortar el espacio que quedaba entre los dos y plantarme un beso por toda la boca, ¿no pasa nada por seguirle el beso o no?. Nuestras bocas estaban en una danza de tango, era sensual pero al mismo tiempo salvaje, nadie quería apartarse pero tuvimos que hacerlo y no precisamente por falta de aire.

_lo siento._mi corazón se agita en mi pecho al oír su voz.

Ella mira la escena boquiabierta, niego con la cabeza y con el corazón latiéndome con prisa, las manos comienzan a sudarme por los nervios.

_ten más cuidado por dónde vas.

Darla asiente temblando antes de abandonar el pasillo corriendo como si se hubiese topado con un demonio, aunque cualquiera que esté frente a Jheremy mackualer podría compararle con uno.

_hay gente tan inepta._enarco las cejas soltando una risa seca, acabo de acordarme la primera vez que nos topamos de frente, esa manera suya de creerse estar por encima de todos.

Odiaba esta manía suya, si hay algo que odiaba de Jheremy, además de su historial criminal, estaba su actitud prepotente.

_¿ocurre algo?._niego estableciendo una buena distancia entre ambos.

_¿que es lo que querías decirme?.

Hace memoria antes de hablar._solo quería que nos presentáramos como era debido, siento que empezamos con mal pie.

Le observo sin creerme mucho lo que estaba diciendo.

_nuestro primer encuentro fue algo...

_explosivo._ Terminé por él, mientras lograba poner una barrera imaginaria entre nuestros cuerpos.

_exacto, y no quiero que te quedes con una mala impresión de mi. _Sentenció como si lo sintiera de verdad, pero ¿Por qué sentía como si aquellas palabras fueran falsas?.

Porque más que tratase de creerle, nada en él me convencía, lo conocía tan bien que sabía que estaba usando una estrategia conmigo.

Cuando iba a responderle vi a Alía acercarse a nosotros con mala cara.

_Jheremy tenemos que hablar._ Mencionó ella una vez cerca de él.

Hola, yo estoy bien y tú.

¿Acaso no tenía modales o que?, me pregunto si todos los que estaban en el mismo círculo social que Jheremy eran iguales. Aunque si tenían el mismo carácter que él, eso estaba asegurado.

La venganza de Brenda OwenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora