Legriel.

"Porque fue real"

Camino impedante y vencido por las escaleras rocosas de esta maldita colina. Ya falta poco para llegar a Valle y coger un buen caballo que me lleve lejos de aquí. Mi destino...Cualquiera menos El Bosque Negro, mi hogar y mi santuario. No volveré, no regresaré jamás. Sólo deseo partir pronto y olvidarme de todas las mentiras, los engaños y los sacrificios que he tenido que pasar hasta ahora. El único recuerdo agradable...Mi difunta madre.....Ojalá pudiera haberme ido con ella....Estoy sólo, nadie me quiere. Todo este tiempo he sido un simple principito prepotente intentando aparentar ser un digno sucesor de mi abuelo.....Supongo que lo de miserable y prepotente es inevitable, lo llevo en la sangre....

Creo que ya estoy llegando a mi destino...Miro a mi alrededor y veo cientos de cadáveres enanos, elfos, orcos, humanos....Diviso a una cercana lejanía lo que parece ser un establo derrumbado. Todavía hay un caballo firme y amarrado a un barrote. Me puede servir.

Al fin, me siento en el caballo. Miro hacia la gran colina que se alza delante de mi y suspiro profundamente....No quiero volver a recordar ese pasado nunca más....Nada de esto ha sucedido...Me dirigiré al Norte y buscaré cobijo con los montaraces Dúnedain...No es por hacer caso al hombre al que llamaba padre ni nada por el estilo, simplemente no se me ocurre mejor sitio para empezar una nueva vida.

De repente, antes de galopar con mi corcél, oigo unas voces en mi cabeza....Vuelvo a visualizar alrededor de mi campo de visión y distingo una silueta corriendo hacia mi. Hasta tengo imaginaciones...Tengo que irme de este lugar en cuanto sea, ahora.

Me prometí a mi mismo no mirar hacia atrás, pero inevitablemente lo hago. Agudizo mis oídos y llego a reconocer que la voz que me dice, en forma de eco:

-¡Legolas, para! ¡Detente por favor! ¡Legolas!

Esa voz...Me causa dolor en mi cuerpo, me produce rabia....Ignorando completamente las súplicas, ordeno a mi montura que cabalgue raudo como el viento. Pero vuelvo a oír esa voz ya más potente y sonora que antes, que a la vez que giro la cabeza y me bajo del caballo, me grita:

-¡No te vayas! ¡Tye-Mélane!

Ella....

Flashback:

"Entre tanta desdicha y prepotencia, Thranduil, herido y cansado se acerca a mi. Me mira con sus ojos húmedos y sin dejar de fijarse en el cadáver de Kili...Que yace en mi regazo...Él, se acerca aún más a mi, y yo le digo, rabiosa y llorona:

-Se le celebrará un entierro digno....

-Si.

Unas lágrimas vuelven a inundar mi corazón y yo, respondo:

-Si esto es amor, no lo quiero. ¿Por qué duele tanto?

No espero una respuesta....Ni la quiero oír. Pero el rey, el mismo que me había desterrado hace horas antes, dice:

-Porque fue real.

Real, real, real, real.....Amor verdadero....Amor real....Según los Eldar sólo existe un único amor y muchas veces uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde....Pero ahora miro a Kili, lo he perdido....Pero, ¿Cuál era su apellido? ¿Cuántos años tenía? ¿Era sólo su capricho? ¿Dónde vivía?....No se nada de su vida. Le he conocido hace dos días....Me siento igual que antes. Ahora que le tengo en mis brazos, me falta algo...o alguien....

Miro a mi alrededor y observo que Thranduil me sonríe....Conozco esa expresión...."Crees bien no lo permitiría. No le des esperanzas cuando no las hay"....Pongo mis ojos de nuevo en Kili pero su presencia, aunque este muerto, no me produce ninguna satisfacción.....