La historia cuenta sobre como Areum, tiene un amor platónico con su vecino desde que son pequeños y él cuál por azares de la vida termina siendo su profesor.
¿Acaso ese inocente amor podrá sobrepasar las líneas que ella misma a trazado en su mente...
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— ¡Hey, salvaje! — Grita en medio del pasillo, haciendo que todos giren a verme.
— Ash... — Cierro los ojos con fuerza y me giro a verlo — ¿Que te pasa? — Cuestionó, molesta.
— ¿Que crees? Ayer estaba acostado cuando se repente tú y Nam... — Explica, pero no lo dejo terminar y tapo su boca con mis manos.
— Cállate — Susurro abriendo mis ojos a más no poder y me lo llevo a la azotea.
— Areum, solo quiero advertirte que has cometido un gran error, ¿Cómo pudiste rechazar al gran, Jeon Jungkook? — Bromea dramático.
Ruedo los ojos con fastidio y lo golpeó suavemente, haciendo que chille y sin evitarlo suelto un risa.
— Gracias por ser clara — Agradece, siendo serio esta vez — Desde el primer momento que te ví supe que eras rara, pero no tanto como para rechazarme — Continua bromeando y deja caer su cabeza sobre mi hombro, pero lo empujo.
— Supéralo, Jeon — Digo y golpeó con mi dedo su frente — Por cierto, ¿De verdad nos viste besándonos? — Cuestionó apenada, haciendo una mueca.
— Si, por cierto se nota que no sabes besar — Se burla y rie por lo último.
— ¡Ahora sí te voy a matar! — Lo amenazó entre risas.
...
— Traje tu comida favorita — Hablo, asomando mi cabeza por la puerta de la oficina de él y lo encuentro leyendo unos papeles.
— Pasa — Levanta su mirada y al verme sonríe.
Con una enorme sonrisa corro y me siento frente a él, mientras acomodo la comida en la mesa.
— ¿Que haces sentada allí? — Cuestiona y lo miro confundida — Debes sentarte aquí — Explica al notar mi mirada y señala sus piernas.
Me atragantó con mi propia saliva y sienta toda mi sangre subir a mis mejillas. Escucho una risilla por parte de él y sin protestar hago lo que me pide.
— Si... — Murmuró enfocando mi vista en la comida.
— Ven, deja que yo te dé la comida — Comenta y colocando un pedazo de carne en su boca, se aproxima a mi rostro para que lo tome de esa forma.
Dudo unos segundos, pero sin más muerdo un pequeño trozo de carne y él se come lo que queda en su boca.
— ¿Estás segura que quieres seguir comiendo o quieres besarme? — Inquiere y me volteo a verlo sorprendida, ¿Acaso podía leer mis pensamientos?
Y sin más, me toma del rostro y me besa.
...
— ¡A ti te estaba buscando, zorra! — Grita una chica de cabello cobrizo, la cual me apunto con su dedo. La miro confundida sin entender nada — ¡No te hagas la santa porque no te queda, solo eres una puta! ¡No te bastó estar con Jeon Jungkook, sino que también estas con el profesor Kim Namjoon! — Continua, haciendo que sienta como mi mundo caiga en pedazos.
Veo a mi alrededor como muchos estudiantes nos rodean y la mayoría de ellos graban todo. Intento defenderme, pero cuando lo hago ella saca su celular y en el muestra una foto de Namjoon conmigo.
— ¡¿Que te ocurre?! — Vocifera el pelinegro, saliendo de entre la multitud.
Le arranca el celular de su mano y la enfrenta, pero para mí nada era audible... En mi cabeza no resonaba nada más que él nombre de Namjoon.
