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            Seunghyun apenas estaba recuperándose de su fiebre, llevaba dos días en cama y Jiyong continuaba cuidándolo en cuanto podía, pues la mayoría del tiempo la pasaba con los ojos puestos en su computador y solo acercándose a la habitación cuando llegaba la hora de que el mayor tomara su medicina. Por su parte, Seunghyun pasaba casi todo el día durmiendo, emborrachado de tanta medicación que se supone lo haría aliviarse lo antes posible pero no hacía más que adormecerlo como si fuera medicamento para dormir a los caballos y él odiaba estar en esa situación, sin poder hacer nada. 


             Jiyong intenTaba en lo posible de estar atento al mismo tiempo que se prohibía a sí mismo pasar demasiado tiempo con Seunghyun porque sentía que si lo estaba, acabaría preguntando sobre la conversación que había quedado a medias y de la que aún tenía dudas sin resolver. El tema no había dejado de darle vuelta en la cabeza, pero por los momentos intentaba enfocarse en cuidar de la salud de su ex-esposo,  el problema ahora era que Soohyuk no estaba completamente contento con esa situación e incluso le había reclamado la razón por la que él mismo había decidio hacerse cargo de la situación, sin embargo, él ni siquiera supo qué responder. 



—Es hora de comer. —Jiyong asomó la cabeza hacia la habitación encontrándose a Seunghyun quien veía hacia el techo, parecía estar despierto desde hace tiempo. —Todavía deberías comer algo de verduras.

—¿Tan rápido es de noche? —Cuestionó sin mirar hacia esa dirección. Tan solo se movió cuando sintió a Jiyong acercarse y posar la mano sobre su frente. —Estoy bien, no te preocupes.

—Tengo que asegurarme, no quiero ser acusado de descuido. —Bromeó con un tono de voz apacible, en esos días había intentado no alterar a su compañero de departamento e incluso eso había generado molestas con su novio. Soohyuk no lo había llamado en horas y eso era demasiado considerando que eran el tipo de pareja que siempre estaban en contacto. —Daesung podría colgarme.

—Si no lo hizo la vez que le dijiste a su cita que él no se baña por las mañanas, entonces no lo hará ahora por un resfriado. —Respondió divertido. 

—¡Ella merecía saber! Nadie quiere estar con alguien que no se baña. —Respondió haciendo un puchero demasiado adorable como para que Seunghyun no se tentara a mirarlo. 

—Es por eso que no le agradas tanto. —Expresó con una sonrisa sutil. —No tengo ganas de comer, pero muchas gracias por... todo.

—Estoy tan complacido de que me invites a comer contigo la comida que preparé para ti, volveré pronto. —Comentó con demasiado entusiasmo, de esos que se notan que son falsos y antes de que el mayor pudiera oponerse se fue directo a la cocina  armar la bandeja con un par de tazas de arroz, tomates y muchas otras verduras cortadas cuidadosamente como para los sabores pasaran desapercibidos por Seunghyun. 

Mientras tanto, el mayor seguía recostando mirando el techo preguntándose en porqué Jiyong seguía ahí, podía estar simplemente con su novio e ignorarlo, pero cada segundo que pasaba con él solo lograba entusiasmarlo más en su deseo de recuperarlo y eso aunque lo hacía sentir mal, también lo emocionaba. —¡Hey! ¿Entonces eso de comer conmigo es verdad?

—¿Cuándo he dicho algo que no he hecho? —Preguntó con una sonrisa acercando la bandeja en la cama y la dejó reposar en la mesa de noche, en donde ya había espacio para eso. —Tengo que hacer que comas o me ofenderé lo suficiente como para no hablarte si no comes lo que me tomó dos horas preparar. 

—¿Por qué te tomó tanto tiempo? —Alzó las manos en señal de paz cuando de inmediato recibió una mirada amenazante por parte del otro. —No estoy quejándome, solo pregunto.

Saudade 「 GTOP 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora