Saudade 「 GTOP 」

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           Sentir el cuerpo pesado, la garganta seca, los ojos adoloridos y el estómago vacío no eran una sensación que alguien pudiera disfrutar. Jiyong no había probado un bocado durante al menos 12 horas, a su lado Daesung se mantenía en silencio después de comer un sándwich que había comprado en la cafetería del hospital. Solo la marca roja en el brazo de Jiyong eran el recordatorio que no podía volver a hacer un escándalo y que debía mantenerse en silencio, en ese tiempo había recibido calmantes y suero en dos ocasiones, lo habían puesto a dormir y aunque al despertar deseaba que todo fuese una simple pesadilla de la que pudiera olvidarse, se encontraba con la triste realidad de un trágico accidente. 

             Jiyong aún se estaba ajustando a las personas a su alrededor, familiares de los tripulantes se habían hecho presente y el cuerpo de seguridad los había movido a una sala más lejana dejando solo ese pasillo para las personas heridas. Se supo que los dos hombres que habían encontrado eran dos soldados especialistas en maniobras tácticas, ninguno de ellos era Seunghyun. Pero horas después lograron rescatar a dos más. Uno de ellos en estado de coma con pocas horas de vida restantes y con el rostro desfigurado, se desconocía su identidad y la identificación por adn se estaba volviendo eterna para todos los que esperaban. 

        El cuarto rescatado se encontraba en otro hospital de un pueblo cercano a donde ocurrieron los hechos, tampoco se sabía su identidad. Mientras que los restantes habían sido declarados muertos luego de explicar en tv nacional que sus cuerpos habían hecho combustión segundos antes de que el avión se estrellara. Los rumores decían que se trataba de los pilotos, pero el corazón de Jiyong se negaba a aceptar que Seunghyun hubiese muerto y mucho menos que ni siquiera fuese capaz de ver su cuerpo.

           Por otra parte, la insensibilidad con la que se manejaban las noticias le era irritable, su Seunghyun no podía ser parte de eso y lo que más le estaba molestando era que por más que quería gritar, levantarse y preguntar si habían identificado a las personas rescatadas, Daesung estaba ahí vigilando cada uno de sus pasos. Solo lo había abandonado por un minuto cuando fue al baño y aun así no tuvo tiempo de ingresar a terapia intensiva para verificar si el hombre en coma era su esposo, él estaba seguro de poder reconocerlo, estaba seguro porque había vivido demasiado tiempo con él como para poder reconocerlo incluso si ningún rastro de su rostro estuviese presente. 

—¿Daesung? —La voz fémina de Lyra cruzó la sala de espera, ganándose la atención de todos los presentes. La pelirroja estaba lagrimeando y con los labios temblorosos. 

—Te dije que esperaras noticias. —Reclamó Daesung mirando a su alrededor. Quizás porque él sabía que su presencia junto a la de Jiyong solo podían causar problemas. Pero su sorpresa fue notar que Jiyong ni siquiera reaccionó. —¿Por qué viniste?

—Es Seunghyun, ¿cómo se te ocurre que no vendría? —Reclamó completamente tensa mientras usaba la manga de su sweater tejido para limpiar sus lágrimas. —Él está vivo.

—No lo sabemos, solo... Necesito que te comportes. —Pidió. 

—No me iré incluso si eso es lo que quieres sugerir. —Ella desvió la mirada hacia Jiyong, quien seguía observando a la mujer, pero parecía no inmutarse con su presencia. Ella cerró sus ojos abrazándose a sí misma, buscando el coraje para acercarse porque en el fondo sabía lo importante que era para él, para ellos. 

—No necesitamos discusiones ahora, por favor. 

—Si lo dices por mi puedes estar tranquilo. —Finalmente fue Jiyong quien habló enderezándose en su asiento. Lucía completamente demacrado y no paraba de rascarse los picotazos de agujas en el brazo, pero justo esa era la razón por la que elegía no hacer nada más. —No quiero que me saquen de aquí, no hasta saber de mi marido.