CAPÍTULO 7

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"Equipo"

Kayden

Después del calentamiento, el profesor procede a realizar los grupos rápidamente, me acerco a las gradas a esperar mi turno, observando como poco a poco mis compañeros se van agrupando.

La cabeza empieza a taladrarme, intento adivinar qué es lo que puede estar causándolo, pero no llego a ninguna conclusión o simplemente intento negar el hecho de que quedarme hasta tarde generó mi malestar, pero da igual.

El profesor dice mi nombre y me levanto perezosamente.

Me planto a unos metros detrás de él esperando al futuro compañero o compañera, solo espero que no sea ningún pesado ya que no tengo los ánimos de tolerar a alguien en estos momentos.

Mis pensamientos son detenidos cuando el profesor empieza a llamar a la persona que estará a mi lado.

Empieza a decir el nombre dos veces y este no aparece, volteo a la dirección del entrenador y en mi campo visual aparece la chica nueva, está tan concentrada mirando el techo que ni siquiera le hace caso al entrenador, este último la llama una tercera vez pero mucho más fuerte, tanto que casi me deja sordo.

Aysel, si mal no recuerdo, se levanta de golpe espantada, observa con detenimiento al entrenador y se acerca trotando, cada paso que da se vuelve más roja y aquello empeora cuando algunos compañeros empiezan a reírse sigilosamente a sus espaldas.

Idiotas

Aparto la mirada rápidamente para no se sienta tan avergonzada.

- ¿Es que no escuchas cuando te llaman? – menciona el entrenador aún más molesto que antes- Ve junto con tu compañero – menciona más relajado y señalando a mi dirección con la cabeza.

- Señorita Aysel Córdova, ¿necesita invitación o qué? – menciona el entrenador.

¡Cabrón!

La observo acercarse sigilosamente, parece asustada y no sé la razón.

¿Será que tengo algo en la cara?

Se detiene justo a mi lado y la observo en todo momento, se ve incomoda y por alguna razón eso me molesta, no quiero que se sienta incómoda conmigo y no sé por qué. No es como que la conozca de toda la vida, apenas y la conocí hoy.

Intento romper el hielo y justo cuando voy a hacerlo aparece Miranda sujetándola del hombro. Aysel da un pequeño salto producto del susto, es la segunda vez que la observo saltar de esa manera cuando la tocan.

- Hola Aysel, ¿te importa si hablamos un momento? – menciona Miranda con ese aire de reina que tiene siempre – Vamos no muerdo, no te importa si te la robo un momento ¿verdad cariño? - menciona viéndome.

Odio que me llame de esa manera como si fuera algo de ella. Ni en sus sueños más recónditos seríamos algo, pero veo que aclararlo siempre no sirve ya que no deja de decirlo.

No digo nada y decido voltearme, deduzco que se alejan ya que oigo unos pasos a mi espalda.

Supongo que ambas serán amigas ya que las he visto intercambiar algunas palabras.

No se me ocurre como alguien como Aysel puede ser amiga de Miranda siendo tan posesiva y jodidamente molesta. Es cierto que no conozco a la nueva, pero no me da pinta de sumisa como para pertenecer a los secuaces de Miranda.

La primera vez que la vi me dejó muy en claro el carácter que se maneja lo cual me sorprendió considerando su tamaño.

Pasan unos segundos y volteo a su dirección, están hablando pero Miranda parece tan cabreada y eso lo deduzco por lo roja que está, Aysel voltea caminando deprisa y yo aparto la mirada para que no se de cuenta que los observé hace un momento.

De un momento a otro se encuentra a mi lado, ninguno de los dos habla y quiero romper el hielo, pero me da la impresión de que está molesta.

Su mirada está centrada en el piso, no la aparta por nada ni siquiera cuando el entrenador da algunas recomendaciones para los siguientes ejercicios. Sus nudillos están blancos producto de la presión que ejerce a cerrar el puño.

Joder tengo miedo de que en algún momento me golpee y termine noqueado.

Parece que la charla no fue del todo bien.

¿tú crees?

Dios este será un día largo y solo espero no terminar noqueado. 

Tu y yo siendo un terrible comienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora